El 20 de agosto de 1968, Mario Renato Menéndez Rodríguez, destacado periodista independiente y fundador del diario PorEsto! pronunció un discurso ante la Asamblea Estudiantil en Ciudad Universitaria. Este evento ocurrió en medio de las crecientes tensiones entre el gobierno mexicano y el movimiento estudiantil que demandaba reformas políticas y sociales.
En su intervención, Menéndez Rodríguez defendió la libertad de expresión, la autonomía universitaria y el respeto a los derechos humanos, elementos esenciales que definieron el movimiento estudiantil de ese año.
Un llamado a la libertad
Don Mario Renato Menéndez comenzó su discurso refiriéndose a la libertad de pensamiento y expresión, derechos consagrados en el artículo séptimo de la Constitución Mexicana. Subrayando que sin una prensa libre y sin la libertad de cátedra, no sería posible hablar de una vida democrática en el país.
Asimismo enfatizó que la libertad es poliédrica, con tantas facetas como la vida misma, y que todos los sectores de la sociedad debían luchar por ella.
"La libertad es poliédrica; tiene tantas facetas como la vida humana, y esta descubre todos los días nuevos ángulos y mirajes; vale decir, tiene más cara y amplia la conciencia de sus derechos. La vida humana mira hacia todos los rumbos. No puede ser representada ni siquiera con los dos rostros que la mitología regaló a Jano para que pudiera contemplar pasado y porvenir. Si de algún modo se quisiera representar la gráficamente tendríamos que escoger el círculo porque en él están presente los 360 grados de la circunferencia."
Menéndez señaló que la libertad "existe o no", y que cualquier ataque a los derechos de los estudiantes, obreros o campesinos debía ser resistido con firmeza. Su mensaje fue claro: la lucha estudiantil por la libertad no solo afectaba a los jóvenes, sino a toda la sociedad mexicana.
"La libertad existe o no. Si la prensa es amenazada en su libertad, si el estudiante es amenazado en la suya, si el obrero, si el campesino, si el hombre de la calle, la cual cualquiera que sea se siente impedido para vivir dentro de los postulados de la ley fundamental de México, nos reunimos con los puños apretados, no para agredir, sino para defendernos."
Solidaridad con el movimiento estudiantil
El discurso de Don Mario Renato Menéndez no solo fue un mensaje de apoyo a los estudiantes, sino un compromiso personal. Declaró su lealtad a la causa estudiantil y destacó que la revista Por Qué?, de la cual era director, se comprometía a respaldar completamente el movimiento. La publicación, que hasta ese momento era quincenal, pasaría a ser semanal para dar mayor cobertura a las demandas estudiantiles.
"Vengo a sellar un pacto de honor y de lealtad, al mismo tiempo que a significarles mi solidaridad absoluta."
Asimismo reconoció la importancia de las demandas formuladas por los estudiantes de la UNAM y otras instituciones, como la Universidad Iberoamericana. Entre los reclamos más destacados, se encontraban el respeto a la autonomía universitaria, la no intervención del Ejército en los centros educativos, y la derogación del delito de "disolución social", que permitía al gobierno criminalizar la protesta.
Una lucha por la dignidad
El discurso también hizo eco de los ideales de la Revolución Mexicana. Destacando que los estudiantes estaban retomando el legado de los revolucionarios que habían luchado por una República Federal y Representativa. Criticó a los líderes políticos que, en su opinión, habían permitido la violación sistemática de los derechos humanos en México.
"...estoy orgulloso de formar parte de sus filas. Tengo la sensación de que ocupamos el lugar abandonado por los líderes mexicanos que han permitido, paso a paso, en esta propia época, la violación de los derechos del hombre"
A través de su mensaje, se posicionó claramente contra el concepto de "poder estudiantil", una noción que, según él, había sido inventada por los detractores del movimiento para desacreditarlo. En su opinión, el movimiento estudiantil no buscaba establecer un poder dentro del poder, sino defender la dignidad y los derechos de todos los mexicanos.
Un llamado final a la libertad
El periodista cerró su intervención reiterando su compromiso con la verdad y la independencia periodística. Sosteniendo que el derecho a la verdad era fundamental para organizar una vida justa y digna. En un tono firme, puntualizó que la libertad es indivisible: no se puede ser libre si los demás no lo son. Por ello, llamó a la unidad de acción entre estudiantes, obreros, campesinos y todos los sectores que sufrían opresión en el país.
"Nosotros, señores, no podemos ser libres sino lo son todos quienes nos rodean; no podemos ser isla de privilegios en el seno de un mar de esclavitud; este acabaría por ahogarnos, por sepultarnos en su seno amargo; nuestra libertad es la de todos. Luchemos por la libertad."
El discurso de Don Mario Renato Menéndez en 1968 es un testimonio de la solidaridad entre diferentes sectores de la sociedad mexicana y de la lucha constante por los derechos fundamentales. Su mensaje, que aún resuena hoy, fue un recordatorio de que la libertad debe ser defendida en todos los frentes y de que los movimientos sociales, como el estudiantil de 1968, tienen un papel crucial en esa defensa.
A continuación te compartimos el discurso completo de Don Mario Renato Menéndez y algunas imágenes publicadas en la revista Por Qué?, de la cual era director, sobre lo ocurrido aquel 2 de octubre de 1968.
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