Eduardo Ramírez, Gobernador electo de Chiapas, anunció su intención de profundizar en la estrategia de seguridad estatal con el objetivo de pacificar la región y prevenir el desplazamiento forzado.
Estas declaraciones se dieron antes de su participación en una reunión con la virtual Presidenta electa, Claudia Sheinbaum, junto con otros mandatarios del sureste del país.
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Ramírez subrayó la importancia de que el Estado asuma su responsabilidad en materia de seguridad, especialmente en la lucha contra delitos como la extorsión, el desplazamiento forzado y el homicidio.
"Vamos a coordinarnos muy bien, a partir del 8 de diciembre, con los distintos niveles de autoridad y de seguridad pública, pero vamos a profundizar más en la estrategia", afirmó el próximo mandatario.
En respuesta a la creciente violencia en la frontera con Guatemala y el reciente desplazamiento de familias chiapanecas a territorio guatemalteco, Ramírez se comprometió a poner "todo su empeño" para abordar estos desafíos.
“Vamos a poner todo nuestro empeño para pacificar a Chiapas, para evitar el desplazamiento y vamos a asumir nuestra responsabilidad”, reiteró.
Además de las cuestiones de seguridad, Ramírez detalló sus planes para presentar proyectos de infraestructura que impulsen la industrialización de la frontera sur, buscando atraer inversión y generar empleo en la región.
"Nuestra propuesta es generar una zona de frontera sur industrial donde los productos que se exportan a Centroamérica se puedan establecer, (ahí) las empresas mexicanas", explicó.
El proyecto contempla incentivos fiscales y la creación de empleos, con el objetivo de atraer empresas, incluidas estadounidenses, a la región. Ramírez también destacó la necesidad de gestionar la migración de manera ordenada y con un enfoque humanista, promoviendo la cooperación en la frontera sur de México.
IO