Cuatro hombres fueron encontrados sin vida en el interior de un automóvil abandonado en el puerto de Acapulco, Guerrero.
El hallazgo ocurrió cerca de las 04:00 horas de este jueves 7 de noviembre en la calle Lerdo de Tejada, en pleno centro de la ciudad y frente a las oficinas de la Sección 20 de la Confederación de Trabajadores de México (CTM).
Los primeros reportes de los medios locales señalan que los cuerpos presentaban evidentes signos de tortura y tenían las manos atadas.
Elementos de la policía acudieron de inmediato al lugar, donde establecieron un perímetro de seguridad mientras que peritos de la Fiscalía General del Estado (FGE) recababan evidencias en la escena del crimen. Los cuerpos fueron trasladados al Servicio Médico Forense (Semefo) en calidad de desconocidos, a la espera de que se realicen las investigaciones correspondientes y de que familiares puedan identificarlos.
Este suceso violento se suma a otro hecho alarmante que tuvo lugar en Chilpancingo, la capital del estado, donde fueron encontrados 11 cadáveres dentro de una camioneta de doble cabina tipo pick-up, todos en la parte trasera y cubiertos con ropa.
La policía ministerial y peritos de la FGE acudieron también al sitio, en un evento que ha conmocionado aún más a la comunidad guerrerense.
Ambos incidentes ocurren en medio de una creciente ola de violencia en Guerrero, que se ha visto agravada en los últimos días por la desaparición de 17 comerciantes a finales de octubre.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó recientemente de un operativo especial para localizarlos, señalando al grupo delictivo Los Ardillos como posible responsable.
La situación de seguridad en Guerrero es crítica y afecta también a figuras políticas. A finales de octubre, el exalcalde de Huamuxtitlán, Aurelio Méndez Rosales, fue asesinado, mientras que el 6 de octubre Alejandro Arcos, alcalde de Chilpancingo, fue decapitado en un crimen que aún no ha sido esclarecido.
IO