Opinión

Fernando Muñoz Castillo

(Comic teatral con un prólogo, cinco imágenes, un intermedio y un epílogo para sicodélicos nostálgicos)I

Advertencia al director

Estos shows/acciones escénicas excéntricas, sin temor a ser moralinos, deben de tener un mórbido sentido fársico, para que puedan ser esperpénticos y se cumpla la estética de lo llamado “¡horrendo!”.

Prólogo

Varias mujeres con parasoles japoneses de diferentes colores arrastran niños alados, los regañan y amenazan. Caminan simétricas. Cierran los parasoles y golpean a los niños con ellos. Luego en un acto frío les arrancan las cabezas y las ponen al revés, acto seguido sacan de sus bolsas de piel de cocodrilo vistosos popotes, los cuales meten en las cabezas como si fueran cocos. Se sientan en el suelo y sujetan las cabezas entre sus rodillas, abren sus parasoles, se ponen lentes oscuros enormes y adornados de piedras de fantasía. Beben displicentes.

Al acabar de beber, guardan los popotes, atornillan de nuevo las cabezas a los cuellos y salen caminando simétricamente mientras regañan y amenazan a los niños alados que arrastran.

Imagen Nº 1

Dos mujeres y dos travestis muy bellas giran alrededor de tubos de table dance. Un ángel las mira extasiado. Ellas juegan sexualmente a distancia con él. El las acaricia. Ellas descienden. Lo seducen. Las mujeres juegan con su verga mientras los travestis lo fornican varias veces sin descanso. Cruza el espacio una verga con alas al estilo sirio. El ángel se maravilla con ella, ésta se detiene frente a él, que la mira extasiado primero, después la acaricia delirante, la lame, muerde desesperadamente y en un acto de intrepidez intenta montarse en ella, pero no puede.

Las mujeres y los travestis, quienes ahora lucen cuernos y colas rojas y lumínicas, lo ayudan a subir. En este trance y su ajetreo aprovechan las mujeres y travestis para con un enorme serrucho reluciente de diamantina, en tono fársico cortarle las alas.

El ángel enloquecido por estar montado en la verga alada, no se percata de la otra acción de las mujeres y travestis.

Por entre coloridas nubes de algodón desaparecen verga y ángel. Abajo las mujeres y los travestis despluman las alas como si fuera una gallina. En el espacio se dejan ver y oír rayos, truenos y relámpagos.