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Hugo Carbajal Aguilar

El Vía Crucis de Morelos

Después de casi 5 meses de iniciar los trabajos este nuevo gobierno en que se han depositado muchísimas expectativas ya podemos señalar a auténticos personajes que van a dañar más las condiciones actuales por su proceder, su historia inmediata, sus conocidos intereses mezquinos y personales, su no vindicación de la política de altura, su alejamiento de toda meta en favor de las necesidades populares y su satisfacción así como su único motor politiquero que los mueve a adular al jefe en turno, a quedarse en un espacio de poder y a continuar con su sobrevivencia en las lides gubernamentales. ¡Cuánto daño han hecho y seguirán haciendo si se les deja continuar con sus aviesas intenciones y objetivos!

Víctor Villalobos, actual Srio. de Agricultura, denunciado como promotor de las transnacionales que trabajan en favor de los transgénicos y que ha invitado a colaborar a Sol Ortiz, una bióloga que ha colaborado con MONSANTO y a quien ha responsabilizado como la encargada del cambio climático sin tener noción ni experiencia en esa área.

Esteban Moctezuma Barragán, Srio. de Gobierno de Ernesto Zedillo a quien sólo obedeció sin chistar, sin emitir una ligera, respetable, mesurada opinión en contra de las decisiones de su jefe (la venta de FERRONALES, p. e.) y que se prestó a la farsa para no cumplir los Acuerdos de San Andrés firmados formalmente con el EZLN. Que no sabe, nunca ha sabido cómo resolver el asunto de la Reforma Educativa tanto que se dará más tiempo y oportunidad de diálogo con los maestros de educación básica para acordar lo necesario. Recuérdese que es una reforma constitucional. Bien podría este sujeto acercarse a expertos y al menos hacer acopio de las experiencias provenientes de otros muchos. Le señalo dos de ellos, por hoy: Angel Díaz Barriga y Hugo Aboites.

Marcelo Ebrard –disciplinado expriísta y más obediente perredista– que cumplió cabalmente con las cuotas de poder haciendo a Elena Cepeda, esposa de Graco, Secretaria de Cultura de la Cd. de México, quien acabó con programas y proyectos culturales exitosos como “Para leer en el Metro” y “Brigada para leer en libertad” aplicado en los reclusorios y otros. Seguramente Ebrard se vio obligado a pagar esa cuota con el perredismo de chuchos y gracos sin que le importara el renglón cultural de esta gran ciudad. Falta que Ebrard les siga debiendo favores y les otorgue una embajada en algún cercano o remoto país. No les importaría. El servicio exterior quedaría como siempre al servicio de cuates y de compadres. Paco Ignacio Taibo y Paloma Sáiz pueden hablar un chico rato de este asunto.

Enrique Fernández Fassnacht, priísta connotado que ganó la dirección del IPN al organizar en Guadalajara, como responsable de la ANUIES, un congreso nacional de educación superior llamado MONTU (Movimiento Nacional de Tecnológicos y Universidades) descarado acto de campaña priísta en favor de Peña Nieto con la presencia del secretario general del PRI, el diputado presidente de la comisión de Educación, el representante del gobernador y el presidente municipal. Los oradores, distintos rectores de sendas universidades, iniciaban su discurso saludando al secretario priísta antes que a cualquier otro. Fernández Fassnacht presume ahora su nuevo puesto como Morenista en la dirección del Tecnológico Nacional de México (TecNM).

Gabino Morales, otro superdelegado en San Luis Potosí, quien cometió abusos con los trabajadores cuando tuvo un puesto en la Delegación Azcapotzalco (invitado por Pablo Moctezuma B.) a quienes pedía parte de su salario para “la causa de MORENA”. Festejó su cumpleaños en estos días en SLP con una megafiesta en la que, se calcula, gastó un millón de pesos por el número de invitados, comida, bebida, viandas y grupos musicales así como la renta de un local. Impuso a la Presidente del H. Congreso Potosino, una diputada panista que dijo lo bueno que significa llevarla bien con el superdelegado.

Hugo Eric Flores, superdelegado en Morelos, de quien no hay nada qué decir a excepción de su defensa como abogado de los asesinos de Acteal; de su lamentable participación en la consulta por la Termoeléctrica, el gasoducto y el acueducto; de su interés por conservar el registro de su puritano y persignado partido que le acarreó notables ingresos y de su recalcitrante fanatismo. Jorge Argüelles, diputado federal por este distrito morelense, era el día anterior a su nominación como candidato un connotado priísta con cargo en el comité estatal. Proveniente de la Cd. de México, como el Cuau, no conoce el Estado y ahora es flamante diputado federal por MORENA.

Morelos, nuestro Estado, ha sido ninguneado, arrumbado por las disposiciones partidistas políticas. Ha padecido un auténtico Vía Crucis con gobernadores muy destacados en el panorama nacional: Jorge Carrillo Olea, quien confió en su secretario de gobierno, Guillermo Malo, responsable de la proliferación de secuestros por no atender los clamores de la población que sufría estos vejámenes y abusos. Afortunadamente hubo, en ese entonces, una legislatura –la XLVII- que mediante Juicio Político resolvió esta problemática. Diputados perredistas en su mayoría participaron con suficiente enjundia y argumentación. No fue Graco ni Ernesto Zedillo. Ya habrá oportunidad de tratar este asunto con mayor detenimiento.

Sergio Estrada Cajigal, la frivolidad hecha gobierno. Marco Adame, enriquecido él y sus compinches por acuerdos exitosos con delincuentes. Graco Ramírez que acabó de confirmar que los cargos políticos son una gran fuente y oportunidad de riquezas que hay que aprovechar, desde luego.

Ahora tenemos a un gabinete plagado de estos trepadores y de otros ciudadanos con trayectorias no precisamente transparentes. El Secretario de Gobierno, Pablo Ojeda, es hijo de Pedro Ojeda Paullada, ocupante de diversos cargos políticos con Luis Echeverría y López Portillo en el lamentable período de la guerra sucia. Amenazaba personalmente a opositores y militantes de izquierda.

El secretario de Agricultura –López Ruvalcaba– es un perredista incondicional de Graco que, además, no tiene la menor idea de la materia de su trabajo al igual que Eliacín Salgado, director del IEBEM. Tal vez sea esa la ficha requisitoria requerida en este sexenio morelense para ser considerado idóneo a algún cargo. Así que no hay nada que celebrar.

¿Qué hará MORENA, como partido con objetivos diferentes al resto, con todos estos personajes?

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