Opinión

Acciones que hay que tomar para su prevención

Roger Aguilar Cachón

Lo que hoy día nos acontece, ya lo vivimos, sucedió hace aproximadamente 9 años y todo el mundo estuvo alerta ante los nuevos brotes y las diversas maneras de contagio. Al igual que cuando nos atacó un ciclón y muchas personas perdieron todos sus bienes, se creó una cultura de la prevención, en la que toda la sociedad yucateca sabe lo que debe hacer y qué no en caso de un posible desastre, en este caso de salud.

Un elemento importante es estar siempre bien comunicado, estar enterado de manera oficial y seria de los casos que están ocurriendo en nuestro país, sobre todo, en nuestro Estado. Para tal efecto, se requiere no hacer caso a rumores y demás noticias que nos llegan de otros lados. Las fuentes deben ser seguras y no como ocurrió en la escuela del de la tinta, donde se estaba manejando una información errada, pero cuando se supo que la información venía de un prefecto, eso no pasó a ser más que una charada.

Las noticias serias las podemos obtener de los medios de comunicación masiva, de la televisión, cuando se traten de programas serios y de la prensa escrita, donde la información siempre es avalada por fuentes dignas de crédito. Debemos evitar las noticias falsas y que, en algunos casos, se filtran en las redes sociales. Esto no significa que en este medio no se pueda confiar, sino hay que tener sus precauciones.

Es conveniente también aclarar que, en algunos casos, hay que valorar las noticias porque se puede crear pánico cuando no somos críticos al leer. Los casos que ha habido y el de muertes en la China continental, hay que contemplarlos desde el índice estadístico, y ver si este número es representativo ante el número de habitantes. No sólo hay que ver la cifra estadística aislada, sino hay que leer el contexto.

La epidemia del coronavirus, llamada Covid-19 o neumonía de Wuhan, apareció en la China continental a principios del mes de diciembre del año pasado, intensificándose en número de infectados al finalizar el año, hoy suman muchos y se ha ido propagando por todo el mundo, no hay lugar donde no haya un paciente con la enfermedad o bien sospechoso de tener algún síntoma.

Al igual que como sucedió cuando la epidemia de influenza llegó a nuestra Estado en el año 2009, el temor y las compras de pánico han estado ocurriendo en los últimos días. Cubre bocas y, sobre todo gel bactericida, se van agotando de manera exagerada de las estanterías, en las principales tiendas y farmacias.

Para continuar con lo prescrito ante la llegada de la influenza en el 2009, la sociedad yucateca debe extremar cuidados cuando en nuestro Estado haya la posibilidad o la certeza de que ya hay alguna persona con esta enfermedad. No podemos hacer sólo que ser cuidadosos en lo que se refiere a la higiene y de seguro no sólo trataremos de combatir la enfermedad que se cierne sobre todo el mundo, sino también contra otras enfermedades.

La experiencia nos dicta que debemos usar de manera cotidiana y seguida, el lavado de manos, ya que desde el 2009, se cuenta en casi todos los lugares públicos, como restaurantes y tiendas, de gel bactericida. Aun en los puestos de comida callejera se cuenta con ellos.

Es necesario crear una cultura de higiene en la casa, en el trabajo y en un lugar donde todo el mundo está propenso a adquirir cualquier tipo de enfermedad: la escuela. Desde el hogar es necesario que a temprana edad, los padres de familia inculquen entre los hijos la necesidad de tener siempre limpias sus manos, traer en su mochila o en alguna bolsa, algún frasquito de gel, y no tocarse la boca, nariz y ojos si tienen las manos sucias. En el hogar, mantener limpio el espacio donde se convive y siempre tener algún desinfectante para usar en la limpieza de los lugares donde se come o se está para ver televisión o hacer alguna tarea, como también para la limpieza de pisos y baños.

En el trabajo, hay que estar siempre al tanto de lo que ocurre con los compañeros, si alguno de ellos presenta alguna manifestación de gripe o catarro, es necesario el uso de los cubre bocas para evitar el contagio. Tener a la mano siempre el gel bactericida y mantenerse informado acerca de la evolución y desarrollo de la enfermedad. Es necesario hacerlo, ya que en un momento determinado se tendrá que hacer frente a esta enfermedad y hacer todo lo posible por mantenerse siempre protegido, ya que hay que recordar que no es sólo el trabajador, sino la familia y su entorno.

La escuela es el lugar donde se debe hacer todo lo posible no sólo para tratar de higienizar a los alumnos y maestros, sino también para establecer una serie de campañas de información acerca de lo que es la enfermedad y de cómo prevenirla. El uso del gel a la entrada a clases es algo indispensable para procurar el bienestar y la salud de los alumnos.

La labor de la administración de las escuelas de nuestra ciudad de Mérida y de todo el Estado de Yucatán debe comprometerse no sólo proporcionar a la entrada y en todos los salones de clase gel bactericida del bueno (no del barato y malo como el que hay en la escuela del de la letra), sino también acudir a los salones de clases, en horas determinadas, para ver si algún alumno presenta algún síntoma de la enfermedad, esto es, si los padres de familia los envían con algún tipo de tos o si tienen calentura o fiebre. El que escribe la presente es testigo que en la escuela donde labora, muchos pater familias envían a sus hijos con calentura/fiebre o algún tipo de enfermedad.

Desde ese momento estamos fallando a nuestra sociedad, no se puede enviar a sus hijos a clase si están enfermos, ya que mientras se detecta si están enfermos o no, la convivencia que tiene con sus compañeros hace que en un momento determinado la enfermedad se propague, ya sea gripe, influenza o bien el famoso coronavirus.

Así es, mis caros y caras lectoras, en nosotros está que tengamos en nuestras manos la prevención efectiva ante esta enfermedad y otras más de las que estamos propensos. Por lo tanto, actuemos con responsabilidad para el bien propio, de nuestra familia y de la sociedad en general.