Por Gabriel E. Manzanilla
SUBTENIENTE LÓPEZ, OPB, 20 de octubre.- Tras los acontecimientos ocurridos en el cruce fronterizo entre Guatemala y México, donde una caravana de miles de migrantes centroamericanos derribaron una valla fronteriza y corrieron hacia territorio mexicano, en la aduana quintanarroense de Subteniente López se mantienen las actividades y vigilancia habitual, sin que se observe ninguna medida adicional a raíz del incidente.
Mediante un recorrido por este cruce fronterizo que conecta a México y Belice, las medidas de vigilancia y revisión de pasajeros se mantienen normales y en aparente calma, tanto en la aduana del puente Chactemal como en la aduana del puente Subteniente López.
De acuerdo con encargados de este recinto aduanal, no ha sido necesario reforzar la seguridad, ya que la problemática de los migrantes centroamericanos se dio en otro punto de la frontera, más concretamente en la de México y Guatemala, por tratarse de una zona con menores medidas de seguridad y más fácil de vulnerar.
En ese sentido, se explicó a este medio informativo que para poder darse una situación de esa magnitud en la aduana entre México y Belice, primero es necesario que los migrantes entren y pasen por territorio guatemalteco, posteriormente tengan que cruzar todo el país de Belice y finalmente llegar hasta México, lo cual es más dificil de lograr dada la seguridad y vigilancia más estrictas de las autoridades beliceñas.
“Para que los migrantes puedan llegar hasta aquí, primero tienen que caminar por todo el país de Belice, de sur a norte, luego tienen que burlar la aduana beliceña, que la tenemos a unos cuantos kilómetros, y finalmente tienen que intentar pasar la aduana quintanarroense, donde contamos con el apoyo del ejército y de la marina”, explicó uno de los trabajadores de la aduana.
Por lo anterior, es que las actividades y vigilancia del puerto fronterizo Subteniente López transcurren en calma y de manera habitual, aunque en caso de ser necesario, se pueden solicitar refuerzos de los mandos militares y policiales para blindar el lugar, pero por ahora dicha medida está descartada.
Para mejor entendimiento del amable lector, el puerto fronterizo Subteniente López está conformado por dos aduanas, la del puente Chactemal y la de Subteniente López, ambas resguardadas por agentes del SAT, Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y Secretaría de Marina Armada de México (Semar). En aproximadamente 3 kilómetros de distancia se encuentra la aduana beliceña, que también cuenta con sus propias medidas de seguridad.
Para poder llegar de Belice a territorio mexicano, es necesario pasar ambas aduanas, aunque a lo largo de la frontera México-Belice existen muchos puntos ciegos y poco vigilados en la zona de la ribera del río Hondo, al grado de que se han convertido en paso diario de beliceños y todo tipo de migrantes ilegales, quienes se exponen a caer en manos de la delincuencia organizada o ser víctimas de la trata de personas para distintos fines.
Como se recordará, el viernes pasado miles de migrantes, en su mayoría hondureños, derribaron la valla del control fronterizo entre Guatemala y México, con la intención de continuar su viaje hacia Estados Unidos.
El caos y la violencia se desataron en ese cruce fronterizo, cuando la caravana de migrantes centroamericanos fueron reprimidos y replegados por la Policía Federal, que les lanzó gases lacrimógenos y utilizó equipo antimotines.