Por Yolanda Gutiérrez
ISLA MUJERES, 7 de noviembre.- Generó expectación entre comerciantes y ciudadanía en general el arribo a la isla de una nutrida cuadrilla de trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), quienes se diseminaron en pequeños grupos por la zona centro del destino con objeto de llevar a cabo una revisión de medidores.
A la par, trabajadores de las oficinas locales de la CFE llevan a cabo trabajos de revisión de las líneas y sustitución del cableado en malas condiciones, algo bastante común en la ínsula debido al exceso de salitre.
El hermetismo privó entre los encargados de las brigadas, que rehusaron proporcionar ninguna explicación sobre los trabajos a los medios de comunicación, como si las acciones emprendidas fueran secreto de estado.
Al consultarles sobre lo que se estaba haciendo, se limitaron a señalar a los medios que las únicas personas que pudieran proporcionar información eran el superintendente de la empresa de “clase mundial” y el vocero de la paraestatal, pero no se pudo localizar a ninguno de los dos.
No obstante, se pudo averiguar que los empleados llegados de Cancún tenían como cometido revisar medidores de los usuarios, concretamente en el primer cuadro de la ciudad y se observó que los trabajadores retiraron algunos medidores, pero al consultarles sobre si serían sustituidos por otros nuevos, la respuesta fue el silencio.
Incluso uno de ellos, que revisaba los medidores del Sindicato de Taxistas, cuestionó el por qué se les tomaban fotografías y, al informarle que eran para el periódico, torció el gesto y no emitió una sola palabra más.
Comerciantes del primer cuadro de la ciudad creen que esta revisión extraordinaria tiene como trasfondo las múltiples quejas ciudadanas acerca de los exorbitantes recibos de luz que llegaron a empresarios y particulares, que en algunos casos representaron un incremento del 600% respecto a su consumo anterior.
“No creo que vengan con buenas intenciones, la CFE nunca lo hace, siempre están pensando en cómo fregar al usuario, más bien sospecho que lo que hacen es buscar diablitos, hubo personas a las que no se les incrementó demasiado el recibo y deben pensar que se están colgando de la luz, por eso vinieron, a ver cuántas cabezas cortan”, fue el comentario de conocido empresario que solicitó que su nombre no fuese publicado.