Quintana Roo

Por Lusio Kauil

JOSÉ MARÍA MORELOS, 22 de enero.- Un comerciante de la avenida principal manifestó su preocupación por la falta de ventas en los negocios, derivado de la reparación de dicha arteria, la cual, según él, va muy lenta.

Indicó que, como la mayoría de los comerciantes ubicados sobre la avenida principal, sus ventas dependen de la gente que está de paso en esta ciudad.

Pero, hizo ver, que por la reparación de la avenida no se está permitiendo que ningún vehículo se estacione, por lo que la gente no puede comprar en las tiendas o consumir los productos que venden en los negocios.

El comerciante, que se identificó como Juan Carlos Sabido Sosa, dijo que vendía un promedio de 3 mil pesos diarios, antes de que empezaran los trabajos de reconstrucción de la avenida, pero ahora a duras penas vende 500 pesos.

Manifestó que ellos se encuentran preocupados porque la luz y el agua no perdonan, y también los impuestos que se tienen que pagar en el municipio.

El comerciante expresó que, “sería bueno que nos dijeran que durante el tiempo que dure la reparación de la avenida, no nos van cobrar los impuestos; eso sería un apoyo que debe considerar la autoridad”.

Sabido Sosa comentó que los trabajos de reparación de la arteria principal se están realizando de manera muy lenta y, por lo tanto, vaticinó que podría no concluir en el tiempo programado.

Según él, personal contratado para la obra está trabajando sus 8 horas y no más, cuando debería ser 24 horas para que terminen lo más pronto posible.

Para el comerciante, la obra tiene 11 millones de pesos en recursos, y con ese dinero se puede contratar mayor personal para que labore día y noche.

La reconstrucción de la avenida principal arrancó la semana pasada, y durante el evento de inicio, las autoridades de la Secretaría de Obras Públicas del gobierno del estado dieron a conocer que ésta terminaría en 5 semanas.

El día de ayer por la mañana, la presidenta municipal, Sofía Alcocer, realizó un recorrido sobre la avenida para constatar los avances, y pidió la comprensión de los vecinos y comerciantes por la molestia que ocasiona la obra, e hizo ver que una vez terminada se verán favorecidos todos los morelenses.

La alcaldesa manifestó que la obra deberá terminar en el tiempo que está programado, es decir las 5 semanas y, por ende, expresó que la empresa constructora deberá redoblar esfuerzos para que pueda cumplir en el tiempo establecido.