Quintana Roo

Por Olivia Vázquez

 

La hotelería en Cancún pierde al menos diez puntos porcentuales en su ocupación hotelera por la oferta residencial que se activó en los destinos y que se lleva ya más del 10.7% del turismo que llega a la región. Roberto Cintrón, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún refería que del 85% que tenían estimado operar el verano pasado sólo se alcanzó el 65 ó 70% por la gente que está activando este tipo de hospedaje sin regulación. Para la temporada de invierno, se estima que ese mismo porcentaje se estará desviando hacia la oferta hotelera residencial que compite de manera irregular con la hotelería organizada.

El líder hotelero señaló que para la temporada invernal las perspectivas son positivas en términos de ocupación, con indicadores que estarán reportando al menos promedios del 85% en las operaciones, con algunas excepciones que alcanzarán su rango máximo (100%) para lo que será la última semana del año.

El porcentaje de ocupación, dijo, será positivo, sin embargo, la oferta residencial hotelera le genera un impacto a los destinos en los niveles de ocupación, pues aunque el Aeropuerto Internacional reporta la llegada cada vez mayor de número de pasajeros, no están llegando a los hoteles.

“La realidad es que lo vimos en septiembre y en verano, te habla de que la gente está llegando a renta vacacional”, dijo. Esta caída en las ocupaciones que se han venido dando en los últimos dos años, le ha pegado a muchos desarrollos que tan sólo en septiembre pasado no alcanzaron sus  presupuestos y esto no es una condición favorable.

Confían que para el próximo año, con la modificación en la ley de ingresos, el sector pueda tener un escenario más parejo y que las plataformas finalmente alcancen una regulación con su pago de impuestos.

En ello, el sector ha referido que serán los municipios los que tendrán la mayor responsabilidad de garantizar este orden pues de ellos dependen permisos y autorizaciones como el tipo de uso de suelo; licencias de construcción; permisos ambiéntales; de Protección Civil y demás procesos que se exigen a cualquier negocio y que sin embargo este tipo de servicio no paga.

En este sentido refieren inmobiliarios y constructores del destino, así como la hotelería, que para iniciar un negocio y concretar la inversión, a veces se lleva un proceso de más de dos años para poder abrir al primer cliente. Sin embargo en este tipo de rentas vacacionales hoteleras, se puede activar un negocio en menos de una hora, lo que se vuelve un tema de regulación y de seguridad que debe ser regulado.