Quintana Roo

Por José Ramos

CHETUMAL, 4 de diciembre.- El Sindicato de Trabajadores Administrativos y Académicos de la Universidad de Quintana Roo (Sauqroo) y el rector Francisco López Mena firmaron el primer contrato colectivo de trabajo que da certeza laboral a sus integrantes.

Tras el amague de huelga y varios días de negociaciones, el rector de la Universidad de Quintana Roo, Francisco López Mena, y el secretario General del Sindicato de Trabajadores Académicos y Administrativos de la Uqroo, Mario Vargas Paredes, firmaron hoy el Contrato Colectivo de Trabajo, en el que ambas partes asumen el compromiso de mantener el diálogo para alcanzar acuerdos en los que se antepongan los intereses y necesidades de la institución sobre cualquier otro, y se dé prioridad a la atención de los estudiantes, quienes son lo más importante de la casa de estudios.

Mario Vargas Paredes, secretario general del Sauqroo, dijo que la firma del contrato colectivo del trabajo es un anhelo guardado en 28 años, desde la creación de la Uqroo, por lo que ofreció a las autoridades universitarias presentes, la total apertura e intención de colaboración permanente, así como establecer la alianza de un diálogo constante para seguir el desarrollo de un clima laboral de armonía y trabajo.

“A nombre de mis compañeras y compañeros sindicalistas, expresó el mayor reconocimiento al Maestro Francisco López Mena por su serenidad, voluntad y visión institucional para firmar ese instrumento laboral que marca una nueva relación entre trabajadores y autoridades de la universidad pública más importante del estado de Quintana Roo”, indicó.

Consideró un logro la firma de este primer contrato colectivo de trabajo, luego de ocho años de lucha contra lo que llamó el abuso de poder de anteriores rectores.

“Entendimos que los rectores tenían compromisos con el gobernante en turno, pero no con la autonomía universitaria o los trabajadores. Rompimos el miedo de ser despedidos por ser considerados trabajadores de confianza y luchamos contra la traición, querella, intriga, difamación, nepotismo, zalamería y otros tantos antivalores sociales que fueron monedas de cambio cada 4 años para controlarnos”, expuso.

Por su parte, el rector López Mena agradeció al sindicato que renunciaran a todas las prestaciones económicas que habían demandado, pues ello, dijo, permitirá a la universidad cumplir los compromisos financieros adquiridos con el gobierno federal para regularizar el número de sus plazas docentes, lo que el próximo año tendrá un costo de 17 millones de pesos.

La firma del contrato colectivo se llevó a cabo en la Sala de Rectores, donde López Mena confirmó que altos mandos administrativos dejarán de percibir 4.8 millones de pesos, que representan un 75 por ciento de los bonos que venían percibiendo en años anteriores.