Por Luis Enrique Cauich
ISLA DE HOLBOX, LAZARO CARDENAS, 28 de abril.- El torneo de pesca de la isla de Holbox ya se encuentra registrada en el Calendario de los Torneos de Pesca Deportiva del Caribe Mexicano, al igual que otros torneos de pesca que se realizan en el estado de Quintana Roo y es la única que es de convivencia, ya que todo lo que se captura por los competidores, se cocina y se comparte con todos los asistentes.
Durante la premiación del torneo de pesca en su XXX edición, los organizadores informaron que desde hace cinco años Holbox está registrado en el Calendario de los Torneos de Pesca Deportiva del Caribe Mexicano y es el primer torneo que se organiza cada año, hasta completar todas las competencias.
Señalaron que de todas las competencias del Caribe mexicano, el de Holbox es la única en su modalidad, porque promueve la convivencia, ya que todo el producto que se captura en el torneo de pesca ribereña, se fríe y se reparte entre todos los asistentes, sean habitantes de la isla o turistas nacionales o extranjeros.
Reconocieron que tres décadas, no son sencillas y desde que se organiza, este torneo de pesca deportiva siempre ha fomentado la convivencia, porque los turistas que llegan se sienten como en casa y conviven entre todos, disfrutando del torneo y sobre todo, de la delicia de un pescado frito.
Se dijo que islas mujeres, Cozumel, y playa del Carmen, antes realizaban la misma actividad, pero esa tradición se ha perdido y se espera que en ediciones próximas se retome la convivencia como la que se vive en Holbox y por el cual, miles de turistas llegan porque se sienten como en casa.
En la orilla de la playa, sentados en la ara, en un rinconcito bajo la sombra de una palmera, junto al muelle o cualquier sitio es ideal, para degustar el pescado frito, recién salido de la caldera, acompañado de su salsa, su limón y un refresco bien helado, señalan los visitantes.
Turistas argentinos, alemanes, japoneses, entre otros países, así como de otros estados del país, se mostraron sorprendidos ayer, por la forma de organizarse el torneo de pesca, puesto que no esperaban que el pescado se regalara al público y sobre todo que los habitantes los recibieran con una calidez que los hizo sentir parte de la isla.