Quintana Roo

Por Karina Carrión

 

COZUMEL, 23 de junio.- Altas temperaturas motivan a las familias cozumeleñas a refugiarse desde temprana hora en los balnearios públicos más cercanos de la zona poniente, las cuales lucen totalmente libres de sargazo, lo que derivó en que fueran saturadas por los bañistas durante este domingo.

Las elevadas temperaturas que se dejaron sentir durante este fin de semana, invitaron a cientos de bañistas a refugiarse en las diversas playas de la localidad, a fin de poder refrescarse en los diversos balnearios públicos para aminorar el calor que se dejó sentir dentro de sus hogares, siendo de las playas más concurridas las de la zona poniente, así como las de la costera sur.

Este domingo desde temprana hora se observó a decenas de familias lugareñas arribar en diversos transportes, tanto propios, como de servicio colectivo, a las diferentes playas de la zona oriente de la isla, entre las que se destacan Chen Río, San Martín, Punta Chiqueros, Mezcalitos, y Playa Bonita, por referir las de mayor demanda, destacándose que las familias que se trasladaron hasta la costa oriental, lejos de preocuparse por la poca sombra o el sargazo, improvisaron con paraguas y sábanas, techos para poder aminorar los rayos del sol.

De manera paralela en la zona poniente de la isla, específicamente en playas como las Uvas, Caletita, Aqua Safari, Casitas y las Rocas, fueron visitadas por las familias que no contaban con vehículo, quienes con menor recurso optaban por disfrutar de sus botanas y bebidas refrescantes, permaneciendo en las playas durante varias horas para retornar a sus hogares más tarde, luego de que aminoró el calor que desde mucho antes del mediodía se dejaba sentir, pero sobre todo disfrutando de las aguas cristalinas y que a diferencia de otros destinos, permanecen libres de sargazo, lo que las hace más atractivas.

Por ello fue un día donde se observó a familias acarreando sus neveras, alimentos y algunos otros hasta sus asadores con todo y el carbón, quienes se albergaron a la orilla del mar durante más de cinco horas para poder disfrutar de un día familiar y refrescante, debido a que la semana había sido muy calurosa.