Por José Ramos
CHETUMAL, 1 de septiembre.- Desaparecen las placas de las esculturas instaladas sobre la avenida de los Héroes, las cuales fueron puestas hace aproximadamente 3 años, cuando se renovó la imagen del Centro de la ciudad.
Son al menos 9 esculturas ubicadas a lo largo de la céntrica avenida, de las cuales fueron sustraídas sus placas distintivas, a pesar de que algunas efigies están instaladas bajo cámaras de vigilancia.
En cada sitio donde se encuentran las esculturas de personajes históricos se pueden ver que las placas fueron despegadas fácilmente de la base, luego de haber sido fijadas con un adhesivo muy parecido al silicón.
De las placas que fueron fabricadas con bronce al igual que las esculturas no queda ninguna a lo largo de la avenida comercial, una de las más transitadas y visitadas por los habitantes de Chetumal.
Las placas hurtadas corresponden a personajes como Andrés Quintana Roo, Miguel Hidalgo, José María Morelos, Benito Juárez, Francisco I. Madero, Cuauhtémoc, Othón P. Blanco, Manuel Antonio Ay, Cecilio Chi y Jacinto Pat. Las estatuas fueron fabricadas en tamaño original en bronce.
Las efigies tuvieron un costo de tres millones de pesos y la remodelación de la principal arteria comercial de la capital del estado fue de 110 millones de pesos, provenientes del gobierno federal, así como bolsas económicas de los fondos de turismo y cultura.
Es importante señalar que el robo y los actos vandálicos a los monumentos y esculturas de Chetumal se han vuelto una constante, pues son pocos los ejemplares instalados en la ciudad que se han salvado de los amantes de lo ajeno.
En julio pasado las placas de bronce, que atestiguaban la inauguración de la tercera etapa del Boulevard Bahía y la Fuente del Manatí, también fueron sustraídas sin que ninguna autoridad se pronuncie al respecto.
Al parecer fueron los amantes de lo ajeno, quienes nuevamente hicieron de las suyas en el Boulevard Bahía, el cual luce cada vez más lacerado por el abandono de las autoridades municipales y los actos vandálicos de la misma ciudadanía.
La apatía de las autoridades por preservar los espacios y la infraestructura urbana ha generado que irresponsables ciudadanos adopten conductas totalmente reprobables y atenten contra el patrimonio cultural de la ciudad de Chetumal.
A lo anterior se le suma la falta de vigilancia y estrategias de prevención por parte de los cuerpos policíacos en el Centro de la ciudad y el Boulevard Bahía.
Cabe recordar que la estatua del cantante jamaiquino Bob Marley, que se encontraba en un parque ubicado en las inmediaciones del Centro Internacional de Negocios y Convenciones y la glorieta del Manatí, sufrió mutilaciones a causa de actos vandálicos.
Posteriormente el Instituto de la Cultura y las Artes retiró la figura para su restauración y su reubicación. La estatua, que fue develada en septiembre de 2016 por el hijo de Bob Marley, Ki-Mani Marley, tras un diálogo con los artistas de Chetumal, se determinó que sería instalada en el Callejón del Arte.
No obstante, en la misma zona se siguen perpetrando actos vandálicos con piezas metálicas que han sido instaladas en monumentos y glorietas, ante la falta de vigilancia y una evidente falta de responsabilidad ciudadana para la preservación los espacios públicos y urbanos de Chetumal.