Por Karina Carrión
COZUMEL, 26 de septiembre.- Riesgoso que autoridades federales consideren implementar el cobro por el Derecho de No Residentes (DNR) a cruceristas, toda vez que esta decisión podría afectar severamente el arribo de las navieras que hoy en día tienen un gran abanico de puertos para visitar, por lo que empresarios del ramo deberán de estar al pendiente del tema, así lo consideró José Trinidad Molina Casares, empresario cozumeleño dentro del mercado la industria de cruceros.
El entrevistado consideró que “teniéndolo en el contexto de la industria de los cruceros, deberá de tomarse en cuenta que las navieras pudieran mover sus activos de una isla a otra; es decir, que pudieran moverse de un país a otro porque ya de por sí la situación económica de ciertas temporadas no son las mejores, este tipo de propuestas federales no concretas, pueden terminar por ahuyentar el mercado”.
Molina Casares, recordó que México se ha logrado posicionar como el mejor del mundo en materia de cruceros y la isla de Cozumel es el puerto de arribo más grande de arribo de cruceristas en el país, lo que representa muchos beneficios económicos para la nación porque ya se cubren impuestos a través de otros mecanismos portuarios, entonces consideró que “la implementación de un nuevo derecho podría hacer que disminuya la llegada de trasatlánticos al destino porque estas grandes compañías podrían buscar otros puertos donde no tengan dichos cobros y hablamos de islas como Gran Caimán, Puerto Rico, entre otras”.
Agregó que durante más de 50 años, la industria de cruceros ha aportado a la isla una economía de primero, segundo y hasta un tercer nivel que abarca desde familias locales hasta a empresarios en todo el mercado, por lo que la afectación del cobro podría generar un choque a sus intereses y los del país.
Asimismo, dijo que a dicha propuesta en la mesa de Diplomacia de Relaciones Exteriores, deberá de analizarse por el empresariado nacional porque de por sí ya ha disminuido la promoción de ciertos destinos con la desaparición del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), Expo-México y otros, lo que lejos de permitir que los empresarios tengan para aportar a la promoción, va a interrumpir sus ingresos para poder proyectar a México en un panorama mundial acerca de los cruceros, por lo que aseveró que “para poder mantener la supremacía en la parte de cruceros México, tendrían que abrirse las puertas de las navieras sin este tipo de situaciones que afecten la economía de quienes dependen de este sector”.