Pese a que en Solidaridad no se ha registrado ningún caso de asesinatos de mujeres tipificado como feminicidios este año, en Playa del Carmen tan sólo en una semana se ventilaron en redes sociales más de 10 denuncias de jóvenes implicadas en supuestas desapariciones, mientras que ante el Ministerio Público se cuentan seis denuncias por este motivo; cuatro de ellas ya fueron localizadas.
En cuanto a la efectividad de las autoridades, apenas hasta septiembre se logró la sentencia de 29 años para Héctor “N”, por el feminicidio de Kimberly “N” ocurrido en mayo de 2019.
En este año, la Fiscalía General del Estado (FGE) informó que se registran hasta la fecha 12 feminicidios a nivel estatal, de los cuales de acuerdo con el Portal de Semáforo Delictivo Quintana Roo, hasta septiembre en Playa del Carmen no hay ningún caso.
De septiembre a la fecha, la FGE emitió 22 Alerta Amber en Solidaridad; sólo 13 de ellas han sido localizadas y vivas.
Sin embargo, aún no se sabe nada de Rosa Isela Gamez Barahona, Ana Cristina Santiz López, Ana María González García, Deysi Imelda Poot Cob, Daniel Cruz Ramos, Nirvana Elain Sánchez Figueroa, Heidi Janet Acopa Bucio, Dulce Fabiola Guerrero Negrete, Lizeth Mayo Regino, Cristal Yazmin Mis Tun, Morelos Monserrat Leyva y Angelina Chuc Dzul, esta última desapareció el 1 de julio de su domicilio en Villamar I; sus familiares encontraron huellas de violencia y dijeron que el sospechosos era la pareja sentimental.
Pocos tipificados
Feminicidio se considera a la muerte violenta de las mujeres por razones de género. Las causas son: que la víctima presente violencia sexual, o mutilaciones antes o después de la muerte; cuando hay antecedentes de violencia familiar, laboral o escolar contra la víctima; una relación sentimental o de confianza entre la víctima y el sujeto activo; cuando hay amenazas, acoso o lesiones hacia la víctima. Además, de acuerdo con la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), se tipifica así en caso de que la víctima se vea incomunicada antes de su asesinato o cuando el cuerpo sea expuesto o exhibido en un lugar público.
Sin embargo, en las investigaciones las autoridades señalan otros delitos, al no contar con información precisa de las condiciones del crimen; a veces se omite y esto hace que varios asesinatos no sean catalogados como feminicidios, aunque sí lo hayan sido.
De acuerdo con la jefa de la Unidad de Derechos Humanos de Amnistía Internacional México, Edith Olivares Ferreto, en Quintana Roo no se inician las averiguaciones con perspectiva de género, lo que lleva a que los delitos sean registrados como homicidios culposos o dolosos y no como feminicidios.
En Solidaridad, las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) indican que en 2017 se registró un solo caso, en octubre; mientras que en 2018 aumentó a seis casos (uno en enero, uno en agosto, dos en septiembre y dos más en diciembre). En 2019 se registraron cinco (uno en marzo, dos en agosto, uno en septiembre y otro más en octubre).
Lentitud de autoridades
Kimberly Olea Castrejón, de 23 años, originaria de Acapulco, fue asesinada en mayo de 2019 por su pareja sentimental en la colonia Centro. El responsable, Héctor Mauricio M.P. fue detenido en Mérida.
Hasta ahora este es el único caso en el que el feminicidio ha sido sentenciado con 29 años de prisión, luego de que el Juez de Control otorgó una orden de aprehensión por homicidio calificado, pero gracias a la defensa y familiares y amigas de Kim, el caso fue tipificado como feminicidio con la carpeta de investigación 2629/2019.
El caso de Vianca Moreno, que ocurrió el 21 de febrero de 2018 en el fraccionamiento Bosque Real, no cuenta para el registro en el SESNSP; su madre indicó a medios de comunicación que la FGE determinó consignar el caso como robo-homicidio, sin considerar las pruebas y testimonios que la familia había recopilado. Incluso, los familiares dijeron que la entonces titular de la Fiscalía Especializada para Delitos contra la Mujer, Guadalupe Reyes amenazó con dar carpetazo al caso si la madre de la víctima continuaba buscando justicia.
“No saben el daño que hacen estos servidores públicos; no hacer bien su trabajo, con tanta burocracia, los hace cómplices del feminicidio”, acusó Vianca Labastida, madre de la víctima.
Dijo que aunque logró cambiar la tipificación de homicidio a feminicidio, lleva dos años y medio de lucha pidiendo que esclarezcan el caso y las autoridades no han respondido. Incluso, tuvo que acudir a Querétaro para exhumar el cuerpo de su hija, ya que en Quintana Roo se declararon incompetentes.
Hace tres días, en redes sociales se pronunció con tristeza de que mientras muchas mujeres levantan la voz para pedir justicia, otras con fines políticos hacen destrozos en nombre del movimiento. “El grito de no generar más violencia, ni una más, tiene un significado muy fuerte, poderoso y debemos sentirlo, sin protagonismo”, reclamó.
Casos sin resolver
Diana Colín murió en diciembre de 2018 en su casa en Palmas II, fue clasificado como feminicidio, pero según el SESNSP no ocurrió, pues sólo tiene un caso de octubre.
Inés May Ovando, de 32 años, originaria de Tabasco, fue asesinada con arma blanca en 2015; el principal sospechoso, con quien compartía su hogar en la colonia Colosio, Miguel A. S. P. huyó.
En el caso de Erika Sánchez Basaldúa de 25 años de edad, originaria de Querétaro, desapareció el 15 de junio de 2019; el principal sospechoso era su expareja, quien se encuentra prófugo. Su cuerpo fue identificado por familiares tres días después de que la encontraron dentro de una maleta y costal con huellas de violencia en la avenida 40 con calles 84 y 88 de la colonia Colosio.
El segundo caso, ocurrió en junio: Juana “N” asesinó a una mujer embarazada a quien se acercó con engaños de que le regalaría ropa, para intentar quedarse con el bebé; luego de cometer el crimen fue detenida en Villas Riviera.
Este año no hay datos oficiales acerca de feminicidios en Solidaridad, pero hay dos casos que podrían serlo: el de una menor de 4 años de edad, acuchillada por su padrastro el 8 de abril en Villas del Sol.
Por Irelis Leal