Aunque los solares urbanos del poblado viejo de San Marcos quedaron como parcelas agrícolas después de ser abandonados por la inundación del mismo hace ya unos 18 años, en la actualidad permanece entre el monte, pues nadie trabaja esos predios como parcelas.
Don Antonio Cime, vecino del pueblo nuevo de San Marcos comentó que en el viejo San Marcos nada pega cuando se cultiva luego de la inundación, ni siquiera lo que son las hortalizas, pues según él, la tierra se volvió muy ácida (alcalina).
Indicó que por esa misma situación nadie trabaja su solar en ese lugar como huerto o parcela, situación que ha hecho que éstos queden sepultados entre el monte.
En un recorrido que se hizo hoy se pudo ver que viejo poblado se mantiene cubierto, efectivamente, por el monte, las casas se encuentran entre la espesa vegetación.
Y es que en junio pasado el viejo San Marcos se volvió a inundar, y algunas personas que tenían sus animales ahí los tuvieron que sacar y mantenerlos en las partes altas del lugar.
Por Lusio Kauil