Ex rectores de la Universidad Tecnológica de Campeche (UTCAM) se reúnen en secreto para pretender lavarse las manos de su participación en la “Estafa Maestra” y culpar al director de Vinculación, Eduardo Lavalle Castro, quien no asistió a la comparecencia de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) e incluso anda huyendo por haber participado en la triangulación de contratos entre dependencias federales y la universidad, y es que de acuerdo a la ASF en su informe del 22 de febrero del 2020, detectó más desvíos de recursos públicos, ahora estando al frente Hilda Velázquez en el 2017 y 2018, por 90 millones de pesos.
La universidad con el mismo esquema de falsa contratación de servicios que realizó Javier Zamora Hernández con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) en el 2016 y 2017, se practicó en el 2018 por parte de Hilda Velázquez Rodríguez al frente de la UTCAM por 90 millones 843 mil pesos, los cuales se hicieron en contratos con el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHP), además de que fue la misma SCHP quien dijo no tener conocimiento de dichos contratos con la casa de estudios y con el Imcine no hay documentos que acrediten algún contrato.
Reuniones de ex rectores
Y es que los tres ex rectores en los que también participa José del Carmen Rodríguez Vera en su gestión del 2018 y 2019, Javier Zamora e Hilda, estos de acuerdo a fuentes confidenciales de la misma UTCAM, se han estado reuniendo en las oficinas de la universidad en el Residencial El Lago, para sostener su versión dada a la ASF, en la que ellos desconocían de los convenios firmados y que falsificaron sus firmas expuestas en los contratos con las dependencias federales, como Desarrollo Social (Sedesol), la SEDATU y ahora el Imcine.
Por ello, mediante oficio DGAP/1090/2019, se hace constar que el 9 de septiembre se le pidió al abogado general de la UTCAM enlace con la ASF, que citara a diversas personas involucradas en la prestación de servicios, de las entrevistas practicadas en las mismas instalaciones de la universidad el 2 y 3 de octubre de ese año, las cuales constan en las actas circunstanciadas 005/CP2018 Y 006CP2018, donde la ASF detectó en base a las declaraciones de Hilda Velázquez, quien estuvo del 27 de septiembre del 2017 al 18 de marzo del 2018, dijo que desconocía los contratos.
“Nada”, con Imcine
En relación con los servicios convenidos con el Imcine, esta manifestó que la Dirección de Vinculación se encargó de la ejecución de dichos servicios bajo el mando de Eduardo Lavalle Castro -en ese entonces titular de dicha dirección-, por lo que ella desconocía de la planeación, ejecución, desarrollo y seguimiento de los servicios.
Cabe mencionar que se solicitó por parte del grupo de auditores que quienes aparecían como apoderados legales y administrador del servicio de la UTCAM se presentaran para entrevistarlos, por lo que la escuela proporcionó sus correos electrónicos donde se les notificó de su comparecencia ante la auditoría, a lo cual argumentaron que no podían asistir a dichas entrevistas en las instalaciones de la UTCAM.
Por ello, la misma ASF señala que con la finalidad de aclarar la información y documentación remitida por la UTCAM, el grupo de auditores se reunió con el abogado general de la escuela y enlace con la ASF, el encargado de las oficinas en Ciudad del Carmen con el apoyo del área de Servicios Patrimoniales, donde los involucrados Javier Zamora e Hilda Velázquez declararon que no participaron en la ejecución, administración y seguimiento de los convenios y contratos fiscalizados; sin embargo, la misma auditoría señaló que hubo omisiones en la entrega de documentación por parte de la UTCAM con la finalidad de ocultar información.
En el pliego de observaciones la ASF documentó que se presume un probable daño o perjuicio a la Hacienda Pública Federal por recursos federales cobrados por la UTCAM en carácter de proveedora de servicios con el Imcine por un monto dos millones doscientos cuarenta mil, y ochenta y seis mil pesos, por los actos de u omisiones de los atribuibles a los funcionarios que en su gestión suscribieron el contrato plurianual de prestación de servicios y a su convenio modificado con el Imcine donde reportaron haber pagado a siete proveedores subcontratados por un importe de 4 millones 378 mil 440 pesos con 52 centavos, el cual representó prácticamente el monto total pagado por prestación de servicios vinculados a los servicios contratados por la dependencia federal.
De lo anterior no existe documentación justificativa y aprobatoria que acredite y justifique las erogaciones realizadas a las personas morales subcontratadas, por lo que la ASF no pudo constatar la aplicación de los recursos contratados, por lo que la UTCAM violó la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en el artículo 134 de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria y Servidores Públicos.
La empresa que recibió el dinero fue KLR Monterrey S.A. de C.V.; sin embargo, no se pudieron analizar las erogaciones realizadas, toda vez que en la misma cuenta bancaria se administraron otros egresos e ingresos, ya que en esa cuenta se administraban recursos federales.
A esto se le suman los desvíos de recursos en la “Estafa Maestra” con la SEDATU y Sedesol por 178 millones de pesos en contratados que la misma UTCAM subcontrató con 14 empresas ‘fantasma’ y que en dichos convenios aparece la firma de Javier Zamora Hernández.
Cabe mencionar que dichos funcionarios son arropados por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) e incluso como servidores públicos, pues Zamora Hernández funge como secretario general de la Universidad Autónoma del Carmen (UNACAR) e Hilda Velázquez ha pasado por varios cargos a nivel estatal y es una de las protegidas del alcalde Oscar Rosas González.
(Texto y fotos: Ignacio Morales)