Quintana Roo

Vigilaba hospital el agente agredido anoche

Por Ovidio López

 

ISLA MUJERES, 1 de mayo. – No fue una bala la que hirió al agente de la Guardia Nacional la noche de este jueves, fue arma blanca, según el informe preliminar de la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (FGE). Se reporta como estable el estado de salud del militar.

Pero el asunto sigue en proceso de investigación con la integración de la carpeta correspondiente, en la que se incorporó la relatoría de los hechos, cuando recibieron los agentes de la Fiscalía el reporte de ataque a las 23:00 horas, en las inmediaciones del Hospital Comunitario de Isla Mujeres.

El agente de la investigación, Jaime Tuz, se trasladó al lugar de los hechos a bordo del vehículo oficial en compañía del perito criminalista José Pech, en la calle Picuda con Av. Perimetral poniente, por la entrada de urgencias del nosocomio, en “dónde se observa a varias unidades de la Guardia Nacional”.

En el lugar, agrega, se observa en el carril de circulación al norte de la calle Picuda, una mancha hemática (sangre) de 10 centímetros aproximadamente. En el lugar “se encontraba el comandante de la Quinta Región Naval, almirante José Luis Vergara, mismo que informa que el lesionado es un elemento de la Guardia Nacional que se encontraba de servicio fijo de seguridad en las inmediaciones del hospital”.

Explica el informe que el agente de la Guardia Nacional, Jhonatan B., al estar de recorrido en las inmediaciones “sintió un dolor en la pierna (izquierda), fue que cayó al piso y empezó a pedir ayuda en ese instante; observó que se retiraban del lugar a toda prisa dos personas del sexo masculino a bordo de una motocicleta”.

Sus atacantes se dirigieron sobre la calle Picuda hacia la calle Corvina (a dos cuadras de ahí, por el domo), se pierden de vista “presumiendo que fueron los agresores”. Al ser revisada su lesión en el hospital, determinan que fue producida por arma blanca, no por arma de fuego; fue traslado vía marítima a Cancún para atención especializada.

 

Causa preocupación

 

El caso de este ataque al agente de la Guardia Nacional provoca preocupación entre los vecinos, especialmente en la zona donde se produjo el ataque, porque ahí se desarrolló un sicariato hace más de un año, las sirenas de ambulancias y de patrullas policiales causan constantes episodios de psicosis, temor y angustia a la gente, según varias versiones.

También, a media cuadra ahí, se asesinó con cuchillo en su propia casa, hace unos días una secretaria de Protección Civil; ya hay un detenido. A dos cuadras, sobre la avenida Isla Contoy, hubo otra ejecución hace dos años. El pasado 18 de abril se ejecutó a un joven en la colonia Cañotal, a 500 metros del hospital.