Quintana Roo

Clandestinos hacen su agosto

De la Redacción

 

TULUM, 22  de mayo.- Largas filas se forman para adquirir bebidas etílicas, al enterarse ciudadanos de los sitios en donde hay en existencia. Algunos la usan para su consumo otros para revender de forma clandestina para obtener buenas ganancias.

Los precios de las bebidas embriagantes son elevados y difíciles de adquirir, a causa de que las autoridades del noveno municipio, a causa del coronavirus,  en las comunidades de la Zona Maya, prohibieron su venta, en tanto en la cabecera municipal las pueden adquirir.

Hay establecimientos que aún tienen en existencia, aunque hay otros más que se las ingenian para que les surtan, la gente tras darse por enterada acuden a formar largas filas para obtener el producto; en algunos se expenden de forma clandestina.

Acto que no sólo sucede en la cabecera municipal sino igual en la Zona Maya, a donde la transportan; pese a que los precios son elevados los consumidores  no se inmutan para adquirirlas.

En este sentido un vecino del poblado de San Silverio explica que un taxi del sindicato “Tiburones del Caribe” traslada cervezas en su unidad, producto que es vendido a los habitantes, reconociendo que desde luego eso le ha dejado buenas ganancias a la persona.

Esto luego que en la Zona Maya definitivamente quedó suspendida la venta del producto, a fin de evitar la violencia doméstica, tras el aislamiento social  que se vive actualmente.

La gente que se dedica a la venta clandestina, se las ingenia para llevar a cabo dicha acción, toda vez que las autoridades han llevado a cabo operativos no sólo en la cabecera municipal sino igual en la Zona Maya y de Transición provocando que diversos negocios hayan sido clausurados en toda la geografía municipal, sin que eso frene la venta clandestina de quienes compran pese a la limitación económica y falta de empleo.