Quintana Roo

Por Justino Xiu Chan

 

FELIPE CARRILLO PUERTO, 26 de mayo.- Debido a la crisis sanitaria provocada por el COVID-19, el aprovechamiento forestal se había paralizado en estos últimos meses, toda vez que el mercado principal, es la zona norte de la entidad. “Apenas se está reactivando, la venta de palizada, madera aserrada e incluso el carbón vegetal, señaló el presidente del comisariado ejidal de Andrés Quintana Roo, Victoriano Uicab.

De acuerdo a información dada a conocer por el presidente del comisariado ejidal de Andrés Quintana Roo, Victoriano Uicab, mencionó que debido a la crisis sanitaria que se vive en el país, en el estado de Quintana Roo y propiamente en el municipio de Felipe Carrillo Puerto, la actividad forestal se detuvo.

Mencionó que “eso a razón de que los principales mercados que tenemos, es la zona turística, como Tulum, Playa del Carmen, Cancún y Majahual, por lo que con la crisis sanitaria se canceló la compra de madera, ya sea en palizada o maderas aserradas”.

Siguió diciendo que “apenas se está retomando por parte de los compradores, toda vez que en estos días los empresarios hoteleros y restauranteros, estarán aprovechando remodelar sus espacios para que cuando reinicie la actividad turística y se tenga un espacio nuevo para ofertar”.

El entrevistado dijo que “las especies de madera que tiene mayor demanda en estos momentos son el tzalam, zapote aserrado y la palizada, eso es lo que se está pidiendo en estos momentos.

Comentó que “para el ejido de Andrés Quintana Roo, la Secretaría de Medio Ambiente, en su momento otorgó un permiso para el aprovechamiento forestal correspondiente a 130 metros cúbicos de palizada, 150 metros cúbicos de madera aserrada”.

La fuente hizo mención que el recurso forestal está siendo aprovechado en una superficie de 5 mil hectáreas, y al concluir la anualidad, “los productores forestales tenemos la obligación de reforestar la superficie aprovechada”, dio a conocer el comisariado.

De igual manera comentó que “para evitar que las puntas y ramas que queden bajo el monte y se convierta en material de combustión para la temporada de secas, estas sobras, están siendo aprovechadas por los productores que realizan la producción del carbón vegetal.

Indicó que “esta actividad tiene una importante demanda en la zona turística y en el norte del país, mismo que se apenas se está reactivando, por el problema de la pandemia que está afectando al país, al estado y municipio; pero confiamos que las cosas ya regresen a la normalidad, y podamos seguir realizando esta actividad para llevar el sustento a nuestras familias”, concluyó Victoriano Uicab.