Quintana Roo

Zona Norponiente la que más basura genera

Por María Luisa Vázquez

 

La pandemia por el COVID-19 pone en riesgo la Ley para la Prevención, Gestión Integral y Economía Circular de los Residuos de Quintana Roo, debido a que durante la emergencia sanitaria se están generando grandes volúmenes de plástico

El próximo 18 de junio dicha Ley, que se compone de 125 artículos, cumple un año de su entrada en vigor en Quintana Roo, de acuerdo al Decreto 337 del Periódico Oficial del Estado, y que el gobierno estatal concedió un plazo de 12 meses para que todas las empresas dedicadas a la venta recipientes de plástico que funcionan para transportar alimentos y bebidas se sustituyeran por material amigable con el medio ambiente.

El director de recolección de basura en Siresol, Luis Antonio Chambé estimó que hasta en 200 toneladas se incrementó el volumen de basura sobre las mil 200 que, en Cancún, se recolectaban hasta antes de la emergencia sanitaria, y refirió que en su mayor parte es basura inorgánica, de la que un 30 por ciento se compone de plástico y unicel, cuando al relleno sanitario, antes de la pandemia, ingresaba sólo un ocho por ciento de todo el volumen de este tipo de material.

La alta generación de productos desechables, De la Torre Chambé lo atribuyó al confinamiento, que ha llevado al consumo de mucho reciente de plástico.

“En toda la ciudad se está generando mucha basura, y más en la zona norponiente, hay alto consumo de basura como cartón, plástico, por el consumo de bebidas embotelladas, recientes de comida, entre otros”.

Por si fuera poco, en esta emergencia sanitaria, restaurantes de todos tamaños funcionan con venta de comida “sólo para llevar”, y el transporte de los alimentos es precisamente en material desechable.

Cabe señalar que en Artículo 22 de la Ley para la Prevención, Gestión Integral y Economía Circular, que en 2019 fue aprobada por la XVI Legislatura del Estado, dice: “se prohíbe en el estado el uso y comercialización de: popotes de plástico; envases para bebidas, platos, vasos, tazas, copas, charolas y cubiertos desechables de plástico; los productos derivados del poliestireno expandido; bolsas de plástico desechables, para traslado de mercancías de mercados, supermercados, tiendas de servicio y autoservicio, tiendas de conveniencia, farmacias, restaurantes y similares”. Se exceptúan los utilizados para fines médicos.

Arnold Ricalde, de la Alianza México sin Plástico, reconoció que Quintana Roo ya llevaba un avance no sólo con la aprobación de dicha Ley, sino que ya se empezaba a erradicar el uso de bolsas de plástico y el unicel, y consideró riesgoso que se quiera regresar a usar el plástico por razones de salud.

No descartó que empresarios del plástico también hagan su parte para que la aplicación de la Ley se retrase todo lo posible.

Cabe señalar que además de que la emergencia sanitaria retrasaría el cumplimiento de la Ley, a partir de mediados de junio, lo que permitirá que sigan usándose artículos desechables, toda la basura de plástico y unicel que se esté generando va directo al relleno sanitario debido a que desde hace un par de meses se suspendió la operación de las bandas separadoras de basura, debido ante la emergencia sanitaria tuvo que dar de baja a los obreros que se hacían cargo de la separación de la basura .