Quintana Roo

 

Por Pedro Olive

 

Los comités de participación ciudadana y sociedad de padres de familia desconocen si hay recursos para reparación de daños a los 36 planteles víctimas de robo durante este período de confinamiento, dependiendo de los planteles, el valor de lo sustraído va de los 14 mil hasta los 60 mil pesos.

Gabriela Romero Rivera, presidenta del comité de participación ciudadana de la primaria “Héroes de México”, refirió que hasta ahora no les han confirmado si la reparación del daño correrá por cuenta de las autoridades educativas, lo único que hubo fue una vista de verificación a las escuelas, en el caso del sector representante de padres, del plantel en mención, comentaron que no cuentan con fondos suficientes de las cuotas voluntarias.

Tan sólo en Benito Juárez son 24 los planteles que han sido violentados durante este confinamiento, y de estos tres han sido perpetrados en más de una ocasión como es el caso del CENDI 2 (en tres ocasiones), José Martí (en tres ocasiones) y Eduardo Huet (en cuatro ocasiones); el común denominador en estos planteles fue cables de cobre y sistema hidráulico, el monto estimado para la reparación, por cada plantel no supera los 20 mil pesos.

“Este ciclo escolar está claro que no regresamos, pero en miras al siguiente, nos preocupa la reparación, sobre todo por los antecedentes que hemos tenido donde esperamos hasta dos semanas para reparaciones por un salón violentado. La zona siempre ha sido conflictiva, pedimos apoyo a las autoridades de seguridad pública para vigilancia, y ante esta situación el plantel volvió a quedar vulnerable”, comentó Gabriela Romero, presidenta del comité.

En el caso de las escuelas de donde sustrajeron equipos electrónicos como computadoras, impresoras o bocinas, dependiendo de la marca, un solo equipo puede costar por lo menos 12 mil pesos, según sea el caso, las reparaciones de aires acondicionados están cotizadas cada una en cuatro mil pesos, según la información de la Secretaría de Educación, a través de su departamento de prensa.

La preocupación de las autoridades es que queda un periodo indefinido sin asistir a los planteles, lo que los hace más vulnerables.