Quintana Roo rebasó con 30 decesos las previsiones más conservadoras de muertes en la entidad a causa del COVID-19, hechas por el Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud (IHME, por sus siglas en inglés), el centro de investigación de salud global independiente en la Universidad de Washington. La institución marcó que en el mejor de los escenarios, para el 17 de enero habrían dos mil 104 fallecimientos y en el peor serían dos mil 125, pero la realidad es que ambas previsiones se quedaron cortas, ya que al corte de este domingo la cifra llegó a los dos mil 134.
Hasta este domingo, Quintana Roo acumuló 17 mil 36 casos positivos. Mil 68 contagios han sido entre el 1 y 17 de enero; 105 fueron registrados entre el mediodía del sábado y el mediodía de ayer.
El reporte de la Secretaría de Salud revela que las defunciones suman dos mil 134, de las que cinco fueron registradas entre sábado y domingo. En este indicador Quintana Roo ha acumulado 103 muertes entre el 1 y 17 de enero de 2021.
El pronóstico del IHME está hecho con base que haya medidas restrictivas de movilidad, que 95 por ciento de las personas use cubrebocas, así como la aplicación de la Sana Distancia.
A pesar de lo revelador de estas cifras, incluso de las que brindan las autoridades estatales de Salud, las mismas autoridades de los 11 municipios de Quintana Roo y del gobierno del estado, han relajado las medidas para evitar que el virus se propague y alcance los mismos niveles que en junio y julio, cuando el número de muertes llegó a ser de más de una persona por hora en un solo día.
Uno de los protocolos que menos se respeta es el aforo en transporte marítimo y urbano, así como en los centros comerciales, comercios de artículos de vestir, áreas públicas como parques y playas. Este comportamiento no es privativo de un solo municipio, aunque sí es más grave en zonas como Cancún, Tulum, Solidaridad, pues en éstas las autoridades han permitido festivales, sobrecupo en el servicio de pasajeros y en las playas.
Desde la primera semana de diciembre, cuando la entidad sumaba mil 945 muertes por COVID-19, el gobernador Carlos Joaquín González ha mantenido su discurso de advertencia en el retroceso en el Semáforo Epidemiológico local.
El 3 de diciembre, cuando Quintana Roo sumaba mil 951 defunciones por coronavirus, Carlos Joaquín González dijo: “quiero decirles que durante los últimos días hemos tenido, de nuevo, repuntes, hoy los riesgos de contagio están por arriba de 1 en la región norte y sur y eso es lamentable porque nos alejamos muchísimo del color verde y nos acercamos al color naranja. Quintana Roo no puede darse el lujo de tener esas caídas y por eso es un aviso a tiempo a todos para tener un mayor uso de los hábitos con los que tenemos que vivir todos los días (…) en la zona norte seguimos en el color amarillo, pero de verdad nos acercamos al color naranja… en la zona sur sigue en amarillo (…) estamos contagiando a más de una persona lo que da una curva en ascenso…”.
En enero 14 de 2021, seis semanas después del aviso de alerta del 3 de diciembre de 2020, pero ya con un acumulado de dos mil 119 decesos por el virus SARS-CoV-2, el gobernador mantuvo su discurso, pero sin hacer cambios en las estrategias para disminuir los contagios y pérdidas humanas.
“AVISO: Nos estamos acercando al naranja en el Semáforo Estatal. El riesgo de contagio ha ido a la alza en la zona sur. ¡Reforcemos los hábitos!”, escribió en su cuenta personal de Twitter.
Este domingo con un acumulado de dos mil 134 defunciones, 189 más que el 1 de diciembre cuando lanzó alertas de repunte de COVID-19 en la entidad, el gobernador avisó que “para proteger la salud de quienes laboran en el gobierno de Quintana Roo” decretó la ampliación de suspensión de labores presenciales no esenciales del 16 de enero al 15 de febrero.
Ya con el acumulado de 17 mil 36 casos positivos de coronavirus, de los que mil 68 han sido detectados entre el 1 y 17 de enero, es decir que 62 personas en promedio por día han recibido la noticia de que están contagiadas, el gobierno del estado publicó en el Periódico Oficial de Quintana Roo medidas de seguridad de inmediata ejecución para la “prevención y el control de la propagación de la enfermedad generada por el COVID-19”.
En estas medidas están el resguardo domiciliario voluntario de las personas de más de 60 años, así como para quienes tienen diagnósticos médicos de hipertensión arterial, diabetes, enfermedades cardiacas, pulmonares, inmunodepresoras o inmunodeficientes, para las mujeres embarazadas, en puerperio, lactancia, independientemente de si su actividad se considera esencial.
También estableció que los vehículos privados sólo podrán llevar cuatro personas máximo, los taxis deberán subir a dos personas como pasajeros y si estos funcionan como colectivos podrán ir al 50 por ciento de su capacidad y sin ocupar el asiento delantero. Las motocicletas sólo pueden llevar una persona.
Reiteró que le uso del cubrebocas es obligatorio para todas las personas que estén dentro del territorio quintanarroense; deberán ser instalados filtros sanitarios en la entrada y salida de cada municipio, así como en los sitios donde sea necesario para verificar el cumplimiento de las medidas de seguridad sanitarias.
Estas medidas entraron en vigor este domingo, pero ese mismo día en Cancún en Playa Delfines los bañistas ingresaban cargando cajas de cerveza, en grupos mayores de cinco personas y sin llevar puesto el cubrebocas.
De acuerdo a los lineamientos en las playas no puede consumirse alcohol, solo cinco personas como máximo pueden ingresar por grupo y deben llevar protección en nariz y boca.
CG