En medio del incremento acelerado de contagios COVID-19 en Quintana Roo, desapareció el programa de “chalecos amarillos” del Gobierno del Estado, el cual servía para la vigilancia y concientización de las medidas sanitarias de prevención a la enfermedad. Del 1 al 22 de enero del año en curso, tan solo en Othón P. Blanco se han acumulado 358 nuevos casos de COVID-19, para llegar actualmente a los 4 mil 614 contagios, de acuerdo con el último reporte de la Secretaría de Salud (Sesa).
La situación es crítica en la zona norte del Estado, ya que por el crecimiento acelerado de contagios las autoridades ordenaron que se le regrese al color naranja del Semáforo de Riesgo Epidemiológico.
A pesar de este panorama, desde que inició el año los voluntarios de “chalecos amarillos” fueron retirados de la ciudad, siendo los que se encargaban de la vigilancia sanitaria en las zonas más concurridas, invitando a la población a cuidar la sana distancia, utilizar obligatoria y correctamente el cubrebocas, evitar las aglomeraciones de personas, mantener el aforo máximo en establecimientos, entre otras medidas de prevención COVID-19.
Mediante un recorrido realizado por Por Esto! de Quintana Roo, se pudo observar que no toda la ciudadanía está cumpliendo con las medidas sanitarias de prevención, tan solo en el centro de Chetumal hay personas que andan sin cubrebocas o lo tienen mal colocado, así como otras que salen en grupos y que no respetan la sana distancia.
MA