Este martes se cumple un año de la dispersión violenta, por parte de policías de Cancún, contra una manifestación de mujeres que exigían justicia por el feminicidio de la joven Alexis.
A pesar de la presión por parte de activistas, el estado perdonó a Alberto Capella; al ahora exjefe de Seguridad Pública, señalado como principal sospechoso de ordenar el uso excesivo de la fuerza; además, desde entonces no sólo no hay avances por el caso, sino que ya se acumulan 24 feminicidios de noviembre de 2020 a noviembre de 2021 de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Insostenible violación de derechos humanos
Amnistía Internacional (AI) aseguró que el municipio de Benito Juárez tiene un problema grave de violación de derechos humanos e impunidad hacia las víctimas de feminicidios, que ya escaló a nivel internacional.
Norma González, Jefa de la unidad de Derechos Humanos de AI, dijo que se han emitido varias alertas para hacer justicia y reparar simbólicamente el daño a todas las víctimas; sin embargo, se ha hecho caso omiso.
“Lo que se vive en Cancún es una situación insostenible, a mi parecer hay una gran violación de derechos humanos, al no hacer caso a las recomendaciones de la CNDH dice mucho de la impunidad, la ciudad es un foco rojo en este momento”, dijo en entrevista para Por Esto!
La experta aseguró que el municipio benitojuarense es uno en los que más ha aumentado la violencia contra las mujeres, sin que se haya hecho algo para revertirla, pues ante los ojos de AI, los feminicidios en Cancún se han disparado por la nula acción del Gobierno y las autoridades correspondientes.
“En los últimos cuatro años, los ataques a mujeres se han disparado, tenemos registros de feminicidios muy violentos, de esos hay pocas carpetas de investigación, seguiremos vigilando para que la impunidad desaparezca y recurriremos a instancias internacionales si es necesario”, recalcó.
Un año sin Alexis
La mañana del 7 de noviembre de 2020, Bianca Alejandrina Lorenzana Alvarado, mejor conocida como Alexis no imaginaba que se convertiría en un feminicidio más en el municipio de Benito Juárez, mucho menos que una marcha para exigir justicia por su muerte sería reprimida, violándose los derechos humanos.
Era sábado, un día soleado, la joven de 20 años se sentía con suerte, pues días antes había concretado la venta de un cigarro electrónico a un hombre identificado como “Badal”, desde las calles del fraccionamiento Vista del Real, de la Supermanzana 252 en Cancún para dirigirse a La Joya, pues tenía la esperanza de conseguir un dinero extra para su familia.
En ese momento Alexis vestía una blusa, un short y unos tenis negros, prendas que fueron detalladas reiteradas veces cuando se denunció su desaparición ese mismo 7 de noviembre, meses antes, a través de redes sociales, la joven había manifestado que tenía miedo de un día salir de casa y no regresar.
El 8 de noviembre, la Fiscalía General de Estado de Quintana Roo (FGE) activó la Alerta Alba y publicó una cédula de búsqueda y localización de la joven, para este entonces, las esperanzas de que Alexis volviera a su casa estaban vivas.
Sin embargo, éstas se disiparon rápidamente, pues trascendió a nivel local que se había encontrado el cuerpo de una mujer dentro de una bolsa negra de plástico en un área verde ubicada en el mismo fraccionamiento donde Bianca Alejandrina desapareció, se sabía que se trataba de Alexis, sin embargo, las autoridades todavía no lo confirmaban.
En su comunicado, el 9 de noviembre la FGE Quintana Roo señaló que el cuerpo de una mujer de 20 años, plenamente identificada por sus familiares con las siglas B.A.L.A., había sido localizado “sin vida y con claras huellas de violencia”; en efecto era Alexis, algo que indignó no sólo a Quintana Roo, sino al país entero.
Sus restos se encontraron después de que una persona reportara al 911 que de una de las bolsas se veía un zapato deportivo. Personal de la Fiscalía adscrito al área de Feminicidios se aproximó al sitio ubicado en la Manzana 34, calle Pandera, para levantar el cuerpo y comenzar la investigación.
Luego de que se confirmara su muerte, colectivos feministas convocaron a una marcha para exigir justicia, ese día tampoco imaginaban que serían recibidas a balazos en la explanada del Ayuntamiento de Cancún, un lugar que debería ser seguro para todos, pero esa tarde no fue así.
Con rabia, hartazgo y desesperación, el contingente feminista partió desde el kilómetro cero de la Zona Hotelera de Cancún con destino a la FGE Quintana Roo, durante ese recorrido se realizaron pintas para pedir justicia, pues en el municipio el índice de feminicidios iba en aumento, al llegar al Palacio Municipal fueron recibidas por elementos que dispararon al aire para dispersar la manifestación lo que dejó dos reporteros heridos: Cecilia Solís, quien recibió un impacto en la pierna derecha y el fotógrafo Roberto Becerril, con un impacto en el brazo izquierdo.
Los hechos no quedaron ahí, pues varias integrantes de los colectivos denunciaron el uso excesivo de la fuerza por parte de los policías, la violación de los derechos humanos y el abuso sexual hacia las manifestantes, las cuales han necesitado ayuda psicológica para intentar superar el episodio.
La violencia y represión escaló a nivel nacional y fue así como Cancún se encontraba en el ojo del huracán; ante la presión, el Gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, público un video en Twitter, en el que señaló al Director de la Policía de Cancún de ese entonces, Eduardo Santamaría, por ordenar las detonaciones y pidió a la Presidenta Municipal, Mara Lezama, la destitución del mando.
Por su parte, Alberto Capella, exsecretario de Seguridad de Quintana Roo, comentó que las acciones de los policías fueron incorrectas. El comité de víctimas señaló que el funcionario fue uno de los principales responsables del ataque; hasta el momento no enfrenta ningún delito en su contra, pues el actual Fiscal del Estado, Óscar Montes de Oca, aseguró que no hay una denuncia en su contra, algo que desmintieron las víctimas de ese día.
Responsabilizan a Mara
La Presidenta Municipal de Cancún separó a Eduardo Santamaría de su cargo, por las acciones contra los manifestantes; en un proceso calificado como burdo y largo, aseguró que se haría justicia por las víctimas y todos los responsables serían condenados.
A un año del suceso, la Alcaldesa sigue sin dar una respuesta, aplicar una sentencia o reparar a las víctimas de los hechos, al contrario se encargó de poner todos los obstáculos posibles para que las investigaciones no continúen y los afectados no sean atendidos.
“Mara Lezama es una de las principales responsables, se ha encargado de humillarnos, despreciarnos y hacer todo para que la justicia no llegue, ni por el feminicidio de Alexis se logró grandes avances, está más interesada en esconder todo, para que no afecte su carrera política, sus aspiraciones a la gubernatura”, aseguró Wendy Galarza.
Los restos de Bianca Alejandrina fueron despedidos el 11 de noviembre por familiares y amigos. Un maestro de Alexis en la preparatoria del Colegio Kukulcán, Adrián Carrillo aseguró que la madre y los familiares pidieron que el funeral de la joven se desarrollara en calma y sin manifestaciones de ningún tipo, esto tras los hechos ocurridos el 9 de noviembre.
Al lugar acudieron 150 personas, todas ellas para despedir a la joven, quien era muy querida por sus familiares y amigos, varios afirmaron que era bondadosa y alegre; la calle fue cerrada para permitir que se colocaran carpas y sillas en la zona, ya que caían fuertes lluvias.
Dentro de la funeraria se dispusieron dos salas privadas para deudos, quienes informaron que el cuerpo de Alexis sería incinerado; los padres pidieron en todo momento recordar a su hija con alegría y dejar la violencia fuera de ese entorno.
A un año del feminicidio de Alexis, han sido capturados cuatro posibles responsables de su muerte, Ali “L”, Ángel “S”, Yohan “B” y Luis “A”, los cuales son considerados los autores intelectuales y materiales de privar de la vida a Alexis. Aquel 7 de noviembre, ni su familia, ni ella misma creían que no volvería a su casa; hasta el momento no hay grandes avances en cuanto a la aplicación de justicia y mucho menos que Alexis sería en el estado un feminicidio más
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CG