Cambiar el término “Turismo Sexual” en la ley era querer tapar el sol con un dedo, opinó Cristina Alcayaga, empresaria hotelera y coordinadora nacional de la Mesa Contra la Explotación Sexual de Niños, Niñas y Adolescentes en el Turismo, del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET).
Lo anterior en relación a la iniciativa que buscaba reformar el Código Penal y cambiar el término “Turismo Sexual” por “Delito Sexual”, pero que al final fue retirada por el diputado federal por Quintana Roo, Luis Alegre Salazar.
El proyecto de decreto buscaba modificar la legislación para deslindar a la industria sin chimeneas de estas actividades ilícitas, por considerar que la estigmatiza, según el legislador.
La iniciativa del diputado de Morena buscaba quitar el término “Turismo Sexual” del Código Penal Federal en el título octavo, capítulo III, en los artículos 203 y 203 Bis.
En su exposición de motivos, Alegre Salazar señaló: “Considero fundamental cuidar las palabras, humanizarlas y despojar al turismo de términos o calificativos que nada tienen que ver con el sector y sí lo estigmatizan y, en mi opinión, distorsionan su potencial y, en muchos casos, lo criminalizan”.
De acuerdo al Código Penal, el delito de turismo sexual se aplica a quien “promueve, publicite, invite, facilite o gestione por cualquier medio a que una o más personas viajen al interior o exterior del territorio nacional a fin de que realice cualquier tipo de actos sexuales reales o simulados...”
“Esto no puede ser turismo ni hay por qué encajonarlo en el concepto de delitos de Turismo Sexual. No todo lo que es visita es turismo o no tiene por qué serlo”, aseveró el legislador en su argumentación.
Al respecto, Cristina Alcayaga puntualizó que omitir el término “Turismo Sexual” no quiere decir que eso no suceda, sino que nada más es voltearse de lado a la realidad.
“Sorprende, porque es un tema que hemos tratado durante años y que dentro del Alto Comisionado de las Naciones Unidas tiene todo un estudio antropológico”, puntualizó.
Agregó: “se ha abordado en la Organización Mundial de Turismo (OMT) por investigadores e instituciones muy serias, por lo que cambiar el nombre era pretender omitir algo que sucede”, subrayó.
“Los empresarios comprometidos con el turismo lo que hemos hecho es combatir este delito con cursos, capacitaciones y campañas internas para que todo el sector conozca de qué trata este problema”, indicó.
“Quitar la palabra me parece innecesario, hubiera causado mucho daño, porque es tratar de tapar el sol con un dedo de algo que existe”, señaló la empresaria hotelera.
En cuanto al argumento de la estigmatización del sector, afirmó que cuidar la imagen del turismo no es cuestión de maquillaje, “hay que ir al fondo del asunto y trabajar para evitar el delito”.
“El que miles de niños sean usados en la redes de pornografía no es cuestión de imagen, es una realidad que no se puede cambiar sólo borrando una palabra en la ley”, aseveró.
Al respecto, la secretaria de Turismo de Quintana Roo, Marisol Vanegas, coincidió en que los términos son lo de menos y lo que importa es trabajar para combatir y erradicar los delitos de este tipo.
“Lo importante es prevenir la actividad relacionada con el Turismo Sexual, creo que lo relevante son las acciones encaminadas en la prevención de delitos contra niñas, niños y adolescentes”, indicó la titular de Turismo.
La iniciativa fue presentada y publicada en la Gaceta Legislativa de la Cámara de Diputados del 12 de marzo del 2019 y de acuerdo al iniciante fue retirada, aunque aparece aún como pendiente de resolución.
CG