El trágico accidente ocurrido el pasado fin de semana, entre un autobús de ADO y un volquete, debe ser un llamado de atención a las autoridades de transporte para que acudan a la zona de construcción del Tren Maya en Quintana Roo y regulen los límites de velocidad de las unidades de carga, que ponen en riesgo la vida de conductores y sus pasajeros todos los días, al circular sobre la carretera federal Cancún-Mérida, afirman conductores y cuerpos de rescate.
Conductores de la zona, señalaron que todos los días se puede observar a los choferes de estas pesadas unidades, manejarlas a exceso de velocidad en la angosta carretera federal, poniendo en riesgo a los demás vehículos y sus ocupantes y, pese a los llamados hechos a la autoridad, nadie ha hecho algo al respecto.
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Mencionaron que el accidente del ADO es una muestra de lo que puede ocurrir en la carretera federal a lo largo del todo el municipio de Lázaro Cárdenas, donde transitan los camiones de volteo.
Desde el año pasado, la Comisión Nacional de Emergencia (CNE), con sede en Ignacio Zaragoza y a cargo de Rafael Dzul, ha pedido la intervención de las autoridades, puesto que han causado numerosos choques por alcance, además de que de forma constante tiran material en la carretera, otro peligro latente para los conductores, por lo que han tenido que acudir a retirar el material de la cinta asfáltica.
Gabriel Tuz, chofer de un taxi de la zona, dijo que todos los días, al recorrer la carretera federal, son rebasados por estas pesadas unidades, que son un verdadero peligro, puesto que con carga no pueden frenar a tiempo y en cualquier momento van a terminar causando otra tragedia como la del pasado fin de semana.
Durante un recorrido se pudo constatar que al menos un par de unidades viajaban a más de 120 kilómetros por hora, a las que no se pudo dar alcance por el tráfico de la zona, dichas unidades se dirigían a la comunidad de Valladolid Nuevo en Quintana Roo, donde tienen el acceso a la carretera de cuota.
Desde Valladolid Nuevo hasta Nuevo Xcan, se puede observar a los camiones de volteo, debido a que en la carretera federal, a la altura de la comunidad de Santa Melba, se encuentra el banco de material conocido como San Miguel, de donde salía el volquete para ingresar a la carretera de cuota el día que causó el accidente del autobús de ADO.
Más adelante, en la comunidad de El Ideal, se encuentra otro banco de material de donde salen los volquetes para llevar el material a la carretera de cuota hacia la zona de Nuevo Xcan, de modo que en toda esta zona el riesgo es constante, debido a que no hay autoridad que regule los límites de velocidad de estas unidades y desconocen si el Instituto de Movilidad del Estado de Quintana Roo (Imoveqroo), tenga las atribuciones para poder realizar un control adecuado.
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CG