A dos años de la desaparición forzada del regiomontano Sahir Alexis López Ruiz, ocurrida en la discoteca Palazzo, en la Zona Hotelera de Cancún, el inmueble, que además es la principal evidencia del caso, ya no cuenta con los sellos que colocaron elementos del área Antisecuestros de la Fiscalía General del Estado (FGE) en 2019, con la finalidad de evitar que la escena donde se vio por última vez al joven con vida fuera alterada.
Dicha dependencia tampoco ha dado a conocer los avances del caso y la situación jurídica de los siete detenidos.
Entre las personas arrestadas hay taxistas del sindicato “Andrés Quintana Roo”, vinculados a proceso por su presunta participación en el delito de secuestro agravado y para quienes un juez dictó prisión preventiva oficiosa por dos años.
Aunque la familia López Ruiz agradece el apoyo de la Fiscalía General del Estado (FGE), por el “esfuerzo”, en las investigaciones de la desaparición forzada, el caso sigue abierto, mientras las estadísticas de secuestro en la entidad se mantienen a la alza.
De acuerdo con información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), de enero a mayo de 2021 se acumulan ocho casos de privación de la libertad en Quintana Roo, lo que implica 60 por ciento más que en el mismo periodo de 2017, el primer año de la actual administración estatal.
Sin pistas de su paradero
Una herida que no cicatriza, vuelve a doler al cumplirse dos años sin Sahir Alexis López Ruiz. Él y un amigo llegaron a Cancún en julio de 2019 para vacacionar.
Mientras se divertían, el joven fue raptado en un centro nocturno de la Zona Hotelera; las familias de ambos jamás pensaron que no regresaría a casa y que cada día que pasaban sin saber de su paradero se volvería un tormento.
Aunque al principio los familiares exigieron a las autoridades que localizaran al joven, difundieron masivamente fotografías con su rostro y organizaron protestas en la tierra que lo vio nacer para ejercer presión, detener a los captores y obtener su liberación, poco a poco perdieron la esperanza. Un mensaje colocado sobre dos cuerpos descuartizados apuntó a su muerte; sin embargo, nunca se confirmó la veracidad de esto.
Las autoridades de Quintana Roo tenían sobre sus hombros a elementos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Nuevo León, así como a una familia la cual, invadida por sentimientos encontrados, creía que López Ruiz sería localizado pronto y con vida; sin embargo, los lugares para dar con su paradero poco a poco se agotaban.
Después de que los presuntos responsables declararon y se buscaron evidencias para hallar al joven con vida; sin embargo, en noviembre del mismo año intentaron darle carpetazo al tema con la detención de siete personas, cuatro de ellos trabajadores de la discoteca Palazzo y tres taxistas del sindicato “Andrés Quintana Roo,” quienes podrían alcanzar hasta 90 años de prisión por el delito de secuestro agravado.
A dos años, en redes sociales, familiares, amigos y conocidos recuerdan a Alexis; ahora sus oraciones y buenos deseos para que él regrese se convirtieron en clamores y gritos de dolor para que se haga justicia por su ausencia.