El sombrero de Jipil, es uno de los elementos característicos de la vestimenta de los pobladores del Sureste de México. Esta prenda es elaborada por artesanos del pueblo de Bécal, ubicado en Calkiní, que es conocido como la capital del sombrero maya.
El sombrero tiene su origen en Ecuador, donde era elaborado por los indígenas de la provincia de Manabí. Esta prenda fue adoptada por los españoles pues descubrieron que servía para protegerse de las inclemencias del sol.
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La palma es una planta parecida la de plátano, con hojas que se abren como abanico. Su nombre científico es Carludovica palmata, aunque en México es conocida como jipijapa, nombre de uno de los cantones ecuatorianos donde era costumbre fabricar sombreros.
Fue a finales del siglo XIX cuando esta planta llegó a Campeche, donde los artesanos adoptaron la tradición de tejer sombreros con las hojas que produce.
Los pobladores de Bécal comenzaron a dedicarse a la producción de estas prendas, convirtiéndose en una comunidad de artesanos que tejen sombreros mayas hasta la actualidad.
Debido a lo anterior, ese poblado es conocido como “la capital del sombrero maya”. Incluso, hay un museo donde se cuenta la historia de esta reconocida prenda.
Este sito cuenta con un espacio físico donde se describe cómo fue que la palma de Jipi se comenzó a utilizar para realizar sombreros, los personajes que influyeron en el proceso y las acciones que estos realizaron.
También explican el proceso artesanal que implica la elaboración de estos sobreros, desde la utilización de los insumos, hasta los acabados y detalles.
Con información de México desconocido y el Museo de Bécal