Yucatán

'Colís”, 'Cocoliso”, por calvo, rapado, etcétera

Roldán Peniche BarreraYucatán Insólito

“Colís” es de origen maya, de acuerdo con el Dr. Güémez Pineda.

Lo escribe con “k” y dice:

K’olís adj. Del maya “k’oos” trasquilar; -lis, sufijo adjetival. Trasquilado, rapado, pelón, calvo. (Fuente: Dr. Barrera Vásquez)

El diccionario juvenil de Edgar Rodríguez expresa:

Colís (Palomillas); Rapado; proviene de la palabra maya k’olis: Calvo.

Como es yucatequismo viejo, ya lo registra Ramos y Duarte en su diccionario de 1898:

Koliz (Pr. Yuc), adj. Pelón, chamorro, morondo. Es alteración del verbo maya “kozlil”, trasquilado, cortado con tijeras.

No lo registran el Dr. Amaro ni el DRAE.

Cuanto a la voz “cocoliso”, que también usamos por calvo o rapado, y que generalmente lo empleamos con los chiquillos, no la registra ninguno de nuestros diccionarios, probablemente por no ser yucatequismo nato, y ni siquiera mexicano, al parecer. Sin embargo, en la historieta de “Popeye el marino”, figuraba un niño completamente pelón al que llamaban “cocoliso”.

Ejemplo:

Visita el Dr. Mendiburu a su barbero el Mtro. Catzín:

-Buenas, doctor -dice el rapabarbas- ¿Le “coliseo”?

-¡Cuidao, maestro! No se atreva.

-Perdón, Dr. ¿cómo lo quiere? ¿Rapado? ¿Colís?

-¡Para nada! Sólo un recorte.

-¡Como no!

La Hora del Poeta

A una niña que canta bonito

Soneto

Hansel Ortiz Betancourt

Niña de luz de arpegios celestiales

Palpita Dios cuando tu voz percibe

Sueñan tu canto ardiente los turpiales

Y postrado el amor, amor concibe.

Sonido tú le das al universo

Y exorcisas las aguas bautismales

Desgranas en tus coplas verso a verso

Las odas de Sabines fantasmales.

Restaña con tus arias las heridas

De este mundo que llora más que canta

Haz con tus notas rosas siemprevivas.

Y a la dulce Calíope encanta

¡Que tu alma se estremezca bendecida!

Porque tu luz, ¡la oscuridad espanta!