Yucatán

TEABO, Yucatán, 5 de septiembre.- Como una tradición de fe y devoción que va pasando de generación en generación, la familia del señor Santos Cen Hau se congratuló en recibir en su hogar a la Santa Cruz de Popox grande, originaria de Hocabá.

La venerada pieza milagrosa, que visita Teabo desde fechas inmemoriales, arribó a esta comunidad el 29 de agosto y permanecerá hasta el 9 de septiembre, como parte de su peregrinación por el interior del Estado durante el año.

Proveniente de la comisaría de Chinkilá (Tecoh), la Santa Cruz fue recibida con alegría por el señor Alfonso Cen Yah, quien la custodió por un día; posteriormente fue llevada a la casa de Santos Cen donde permaneció hasta la tarde de ayer miércoles.

“Si le pides con fe, te concederá el milagro; así me enseñó mi mamá, lo comprobé y yo también le enseñé a mi familia; nosotros le tenemos mucha devoción a la Santa Cruz”, compartió doña Severiana Hau Caamal, de 83 años de edad y madre de Santos.

Con motivo de la visita al hogar, a la reliquia de madera le ofrecieron rezos durante el día, como una promesa de fe de la familia, al que también se suman varios lugareños, en su mayoría gente adulta y de la tercera edad.

Por cada día, la familia anfitriona le ofreció un rezo al mediodía y otro por la tarde, acompañado de su respectivo alimento. Por la noche, se realizaron los novenarios donde las “nocheras” refrendan su gratitud con la donación de bocadillos.

Fieles a la devoción hereda por sus consanguíneos a lo largo de varias décadas, doña Severiana y su esposo Lorenzo Hau Cen Poot de 85 años, se han dado a la tarea de trasmitir ese signo de fe a sus hijos y nietos.

La señora Leticia Chan, esposa del anfitrión, recordó los relatos de los lugareños donde comparten la fiesta popular que la comunidad celebraba con motivo de la visita a Teabo de la Santa Cruz de Popox.

Por su parte, doña Alejandra Canté de 74 años, quien acudió para realizar una oración y encender su vela, indicó que desde que tiene uso de memoria, siempre ha tenido profundo respeto y devoción a la reliquia.

“Desde que era niña, mi mamá me llevaba a visitar a la Santa Cruz cuando llegaba a un rancho ubicado en Sanahcat; ahí se le hacía una fiesta con muchos visitantes. Es muy milagroso, él te concede su bendición”, aseveró.

Durante la estancia de la venerada cruz en el municipio, el hogar de las familias es visitadas por lugareños a todas horas para encender una vela, llevar flores a la pieza de madera arropada por prendas de oro, así como participar en los rosarios.

La visita de la Santa Cruz de madera a Teabo, tiene un gran significado para varias familias quienes han hecho de la peregrinación, un signo de fe heredado por varias generaciones.

La pieza milagrosa permaneció en el predio de la familia hasta la tarde de ayer, posteriormente fue llevada en procesión a la casa de Javier Calderón, donde permanecerá hasta el 09 de septiembre; fecha en que los fieles devotos de Xkanchakán, Tecoh, acudirán para llevárselo y continuar con la peregrinación.

En lo que respecta a la pieza de mayor tamaño, visita la población en tres ocasiones durante el año; la primera en el mes de febrero, donde llega por única vez acompañada de la cruz pequeña; la segunda visita se efectúa en agosto y la tercera en el mes de diciembre.

La visita a Teabo está a cargo del señor Luis Gonzalo Caamal Ucán, custodio en la comunidad desde hace 19 años, quien adquirió dicha encomienda al fallecer su padre, que estaba a cargo de organizar las visitas. Actualmente, la comitiva cuenta 27 socios.

(Carlos Ek Uc)

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