Romeo Frías BobadillaEn un abrir y cerrar de ojos
No estaba muy lejana la hazaña de un director policiaco que hizo mucha propaganda a la presencia de “cazones”, más no tiburones, en la costa oriental y estaba en boga las películas de escualos que habían sido hechas con peces de goma muy reales.
Todo eso tenía a la gente preocupada, no obstante que las playas de Progreso son las más generosas de la república, sin rocas, cantiles ni animales peligrosos cerca del litoral.
Tenía en un estado de nervios a la gente por la psicosis de los animales, pero eso era todo, pues el panorama de este puerto seguía siendo el mismo respecto a las virtudes de este lugar.
No faltaron guasones que pretendiesen dar humorismo al momento fabricando aletas de madera con su base que flotaban en el mar, dando la impresión de que eran escualos. Las familias protestaron por la gracia de los muchachos y se quejaron ante las autoridades por esa forma de asustar a los bañistas en momentos tan inoportunos.
¡Vaya forma de jugar con los temporadistas!, gritaban nuestros visitantes. ¡No hagan eso, que asusten ya saben a quién!, protestaban. Las playas de Progreso son las más bonitas y agradables de México, reconocen todos.