La Secretaría de Desarrollo Rural destinará este año 6.5 millones de pesos para el combate a la langosta, pues la protección a los cultivos y la ganadería en el Estado es una prioridad para la presente administración, manifestó ayer el director de Sanidad e Inocuidad Agroalimentaria, Gerardo Solís Pasos.
Entrevistado en su oficina, explicó que en ese sentido el combate al acrídido es frontal y permanente con brigadas de trabajadores del Comité Estatal de Sanidad Vegetal, que tienen sus bases en Mérida y Tizimín, de donde parten hacia otras zonas para eliminar las mangas.
Hizo notar que Yucatán posee la zona de reproducción del insecto más grande de Centroamérica con 420 mil hectáreas, ubicadas particularmente en la zona Oriente del Estado, que abarca los municipios de Dzilam González, Tizimín, Buctzotz, Espita, Cenotillo, Sucilá y Panabá.
Obstáculos
Observó asimismo que para llevar a cabo las fumigaciones hay varios obstáculos que limitan los trabajos, como áreas urbanas, ranchos, áreas naturales protegidas, sitios donde se encuentran granjas, apiarios y cuerpos de agua, ya que el producto químico que se dispersa puede afectar a las personas o animales.
Explicó que la labor de las brigadas no es fácil debido a que se tienen que adentrar hasta los montes o pastizales para identificar y monitorear a los insectos, a veces mediante el uso de binoculares. Una vez que se posan se procede a la fumigación. En la etapa de larvas, para los meses de junio y julio, se aplican productos biológicos para preservar el medio ambiente.
Detalló que, desde la tarde o noche, se identifica el lugar donde bajan las langostas de tal manera que entre las seis y nueve de la mañana del día siguiente se lleve a cabo la fumigación, antes de que vuelen los insectos debido a que sus alas todavía están mojadas por el rocío.
Control biológico
El funcionario añadió que, aunque existe la alternativa de fumigar a las mangas vía aérea, hasta ahora sólo se ha considerado aplicar los químicos en tierra, pero se valorará la eficacia y costos sobre utilizar el primer método.
Solís Pasos señaló que, hasta la fecha, no se han registrado afectaciones a cultivos y en cuanto a la labor realizada tan sólo en esta primera semana de enero, los 18 elementos de las brigadas han combatido un total de 57 hectáreas en Motul, Mérida, Progreso, Yobaín, con 12, 6, 29 y 10 hectáreas, respectivamente.
Los trabajos más recientes fueron dos mangas en dos hectáreas de Motul y 6 mangas en Mérida.
Asimismo, durante los meses pasados y hasta la fecha se han fumigado 109 mangas y 514 manchones en una veintena de municipios, entre los que se contabilizan 33 mangas en Buctzotz, 13 en Dzilam González, 29 en Río Lagartos, 4 en Tizimín, y la misma cantidad en Cenotillo y Dzidzantún.
Los objetivos del combate son reducir al mínimo las pérdidas a la agricultura y ganadería, así como los costos de control mediante el combate oportuno a la plaga.
Finalmente, el funcionario exhortó a todos los productores a que colaboren con la campaña, particularmente a los propietarios de espacios privados, para que cuando identifiquen la presencia del insecto lo reporten y permitan a los brigadistas ingresar para que realicen las labores de fumigación.
(Rafael Mis Cobá)