Al fin aparecieron las bombitas. Sin embargo, los inspectores y la Policía Municipal andan muy estrictos; ayer, alrededor de las 12 del día, en la calle 65 entre 58 y 56, suspendieron la venta en un puesto que al parecer ofrecía “productos de alto impacto”, aunque eran los garbanzos que se avientan al suelo y que muchas veces no funcionan porque son de origen chino. No obstante, el vendedor retiró esa mercancía y pudo continuar con su actividad.
Según datos de algunos venteros, los precios van de los 10 a 30 pesos, pues pese a que a ellos les incrementaron hasta en 60 pesos la mercancía, se ven obligados a mantener los mismos costos pues “hay mucha competencia y si damos más caro que otros, perdemos clientes”.
El operativo es fuerte y abarca todo el Centro Histórico y ciertas avenidas que se autorizaron para la venta, aunque ayer no les fue muy bien, especialmente en la tarde, ya que con la lluvia muchas bombitas se mojaron.
Según el Ayuntamiento de Mérida, desde este domingo 22 al 24 de diciembre y del 29 al 31, un total de 371 puestos podrán instalarse para la venta de estos productos, 92 en el centro histórico y 279 alrededor de la ciudad.
Entre las recomendaciones de seguridad están que no deben tener instalaciones eléctricas, contar con dos extintores de polvo químico seco, una cubeta con arena, señalética de prohibido fumar, vestir ropa de algodón y zapatos cerrados.
Deben permanecer en todo momento en sus puntos de venta, expender únicamente productos de origen nacional, no vender pirotecnia a menores de edad y no permitir la manipulación de pirotecnia en los puntos de venta.
(Rafael Gómez Chi)