Pilar Faller Menéndez
Mientras muchas familias dan los últimos toques y terminan de cocinar los platillos que pondrán en sus mesas la noche de navidad, otros se ponen su uniforme de trabajo para irse a cumplir sus obligaciones laborales que, como cualquier día, deben cumplir. Algunos, incluso, deberán redoblar esfuerzos, ya que esta noche habrá que poner más dedicación que en otras fechas.
Prácticamente para todo el mundo, tanto la Nochebuena, como la Navidad o año nuevo, son días de fiesta y de estar reunidos disfrutando a la familia, pero para muchos profesionales, son días en que sus trabajos requieren de mayor actividad. Son diversos los trabajadores que en estas fiestas no pueden dejar a un lado su deber para disfrutar un día de fiesta, ya que deben estar al pie del cañón, con el fin de procurar que las demás personas puedan pasar unos días agradables.
Entre estas profesiones están los policías, médicos, enfermeros, meseros, conductores de autobuses, pilotos de avión o periodistas que no descansan en Navidad. Los responsables de los servicios de urgencias de los hospitales de todo el mundo, deben de estar atentos a cualquier accidente que pueda ocurrir en estas fiestas, así como los policías que deben vigilar el orden para que todas las personas que van de fiesta en fiesta puedan hacerlo de forma ordenada y segura, ya que es una noche en que muchos ingieren bebidas alcohólicas.
Los encargados de mantener las calles limpias, con su trabajo silencioso y muchas veces poco reconocido, contribuyen a que la ciudad se vea limpia después de la Nochebuena. Aquéllos que tienen también un trabajo muy sacrificado es el servicio que trabaja en las casas, ya que pasan las fiestas lejos de sus familias sirviendo a los demás o incluso, acompañando a las personas mayores que carecen de familia para que puedan tener un buen día y se encuentren seguros.
El sector turístico también forma parte de este grupo, ya que hay la tendencia de pasar la Navidad fuera de casa o bien, celebrándola en restaurante, por lo que camareros y cocineros atienden las mesas y cocinan cenas que no serán suyas. No podemos olvidar a las personas que tienen que conducir a las personas que deben llegar a su destino, y a los trabajadores de las gasolineras, o bien, los que trabajan en tiendas de conveniencia que permanecen abiertas veinticuatro horas los 365 días del año.
Otras personas que no deben descansar durante estas fiestas, son los periodistas de los medios, ya sea de televisión, de radio o en las redacciones de los periódicos, con el fin de cumplir la tarea de llevar la información al público todos los días del año.
Pilotos de aviones y choferes de autobuses, son otros ejemplos de que el trabajo en estas fechas debe realizarse, llueva, truene o relampaguee, porque el mundo no se detiene, porque hay deberes que no pueden tener el privilegio de tomarse un día celebrando estas fiestas con sus familias, a todos ellos, se les agradece el esfuerzo para que los demás podamos pasar una feliz Navidad.