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El presidente de la Alianza de Cantineros de Yucatán, Edmundo Echeverría Urcelay, denunció ayer que hay una campaña de hostigamiento contra estos negocios por parte de las autoridades del Sector Salud de la Entidad y de los municipios, por lo que solicitó respeto, pues son parte importante de la economía.

El dirigente se reunió ayer con representantes de varias cantinas de Mérida y de diferentes municipios, quienes denunciaron diferentes acciones que consideraron de hostigamiento contra sus negocios, ya sea por parte de la Secretaría de Salud como por parte de los presidentes municipales.

Dijo que el tema principal es que hoy los compañeros de la agrupación están trabajando en zozobra y sin tranquilidad, pues ya se han dado casos donde llega personal de la Secretaría de Salud y, sin que haya una orden de por medio, clausuran las cantinas.

De la misma forma, municipios donde los alcaldes quieren imponer horarios de forma arbitraria y ordenan incluso que determinada cantina no puede abrir, lo que va en contra de la ley.

Respeto a la ley

“Lo que las autoridades deben tener en cuenta es que somos empresas legales y que pagamos impuestos, además de que generamos empleos y somos un engranaje importante de la economía y, por ello, pedimos que no nos estén atemorizando y que se respete la ley”, comentó.

Los cantineros mencionaron que en varios lugares han llegado inspectores de la Secretaría de Salud con la intención de clausurar los negocios, sin notificación previa, lo que es irregular.

“Porque si hay alguna anomalía deberían hacer una visita y notificarnos, ya sea para que se pague una multa o que se subsane el problema, pero no ha sucedido así, ahora están llegando y con la intención de clausurar”, comentó Echeverría Urcelay.

Dijo que la Ley de Salud es clara y se debe respetar y más aun si todos ellos ya cumplieron con lo que marca este ordenamiento, por lo que reiteró el llamado a que los dejen trabajar.

El caso de Baca

Mencionaron el caso de Baca, donde la presidenta municipal quiere imponer su horario para las cantinas hasta las 5 de la tarde, cuando señalaron que la Ley de Salud claramente les autoriza un horario de 12 del día a 10 de la noche.

En otros casos, cuando los alcaldes venden la fiesta de pueblo, resulta que quieren ordenar que las cantinas no abran.

“Nosotros tenemos elementos para defendernos y los haremos valer y, por ahora, hacemos un exhorto a las autoridades a que respeten nuestros negocios, porque somos generadores de empleo y cumplimos con lo que marca la ley”, reiteró.

Dijo que la intención de la reunión de ayer es escuchar las inquietudes de los agremiados y saber cuáles son las autoridades que están incurriendo en estas actitudes de intimidación, para buscar un acercamiento con ellas y entregarles de ser necesario un pliego petitorio.

Recordó que los cantineros están ya muy golpeados de por sí, pues cuando terminó el gobierno de Ivonne Ortega Pacheco subió el costo de las licencias para venta de alcohol, que pasó de 55 a 12 mil 664 pesos, además de que hoy se tiene que pagar una cuota de mil pesos para la Cofepris.

Además, dijo que el Ayuntamiento de Mérida acaba de subir el precio de la licencia de funcionamiento a 2 mil 800 pesos.

Censo

A la reunión de ayer acudieron representantes de cantinas como “Bar Tony”, “El Guerrero Negro”, “Bar Manantial”, de Mérida, “Bixabel” de Baca y “La palapa” de Sotuta, entre otros.

Sobre el número de agremiados, dijo que hace algunos años había alrededor de 3 mil afiliados, pero ahora se hará un nuevo censo para saber el número exacto.

(David Rico)

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