Confirman que Comuna quitó sellos en talleres de Dzityá

El secretario de Participación Ciudadana, Julio Sauma Castillo, aseguró ayer que mediante el diálogo y la conciliación los dos talleres de Dzityá que habían sido clausurados al inicio de semana fueron reabiertos para que continúen con sus actividades.

Indicó también que el Ayuntamiento no se opone a que los propietarios de los talleres regularicen la operación de sus negocios e incluso recomendó que inicien el proceso en conjunto y no de manera individual, para que sea más ágil la tramitología y el dictamen correspondiente.

Hizo notar que este tipo de permisos, que incluyen uso de suelo y licencias de funcionamiento, tienen que ser aprobados por el Cabildo y precisamente por ello sugirió que las solicitudes se hagan de manera colectiva a fin de no trabajar expediente por expediente.

60 talleres

El funcionario calculó que, en Dzityá, operan alrededor de 60 talleres artesanales de piedra y madera y, aunque dijo que algunos ya están regularizados, no precisó el número al señalar que no tenía a mano esa información.

Explicó que la mayoría de los talleres están asentados en predios del fundo legal y, mientras no se desincorporen de esa figura, no pueden ser regularizados.

Puntualizó que, una vez que los predios logren esa desincorporación y pasen a ser propiedad privada, entonces los titulares pueden llevar a cabo los procesos de solicitar los permisos correspondientes y, de esa manera, quedar regularizados.

Cuando se le preguntó quién retiró los sellos de clausura, debido a que los dueños de los talleres aseguran que se hizo en la noche y sin notificación oficial, Sauma Castillo sostuvo que “tenía entendido” que al ser un asunto de Desarrollo Urbano y tras llegar a un acuerdo entre las partes involucradas, se procedió a retirar los sellos para que los trabajadores se reincorporaran a sus actividades.

Dijo que uno de los dos talleres clausurados, propiedad “de un tal Vargas”, tenía ya algunos antecedentes de conflicto con algún vecino, pero que mediante el diálogo y el respeto de horarios y condiciones de trabajo se está tratando de resolver definitivamente el problema.

(Rafael Mis Cobá)