YUCALPETEN.– “Estamos a 15 días de iniciar la temporada de pulpo y no tenemos nada, sólo los alijos, nada sobre la carnada ni las jimbas ni los plomos ni nada, no sabemos nada; en otras temporadas a los 20 días ya estamos con preparativos, pero ahora estamos con el ánimo decaído y a la espera”, dijo José Lázaro Avila, patrón del barco “Nicté Ha” en el Puerto de Abrigo.
La apreciación de este hombre de mar coincidió con las de sus compañeros sobre la incertidumbre que impera en el puerto, ya que no han recibido los adelantos de dinero para preparar las embarcaciones, por lo que calculan que, aunque la temporada de pulpo abre oficialmente el 1 de agosto, los primeros viajes se harán luego de esa fecha.
“Tal vez las jimbas lleguen para la otra semana, pero ahora no tenemos nada avanzado, más que los alijos; no vamos a salir para los primeros días, es muy probable que sea para días después; nuestro ánimo está decaído, no hay nada y parece que todo está así por el precio, se rumora mucho sobre el bajo precio y eso ha hecho que no se hayan empezado todos los preparativos.
“Quién sabe qué esté pasando”
“Ha sido de las peores épocas, ya regresaron los primeros barcos langosteros y nos dicen que regresaron bajos y en escama también ha ido bajo, quién sabe qué esté pasando; nosotros fuimos a la escama y traíamos 800 kilos, cuando debíamos traer tonelada y media, por eso sólo estamos esperando a ver qué pasará con el pulpo”, relató Enrique Bacelis, patrón del barco “San Rafael 10”.
El Puerto de Abrigo de Yucalpetén lució ayer con poco movimiento, se observaban algunas reparaciones de alijos, en las calles aledañas, pero muy pocos barcos se alistaban para hacer un viaje nuevo de escama o langosta, además de que varias embarcaciones estaban amarradas.
La temporada de pulpo comienza el 1 de agosto y finaliza el 15 de diciembre de cada año; es la segunda pesquería más importante del Estado por su impacto social y económico, ya que en sólo 4 meses y medio más de 12 mil pescadores se hacen a la mar en embarcaciones mayores o ribereñas.
“No sabemos cómo anda la cosa, supimos que salieron unos biólogos a ver lo de la biomasa, esperaremos a ver qué dicen”, dijeron los hombres de mar.
POR ESTO! publicó ayer que se instalaría el Comité Consultivo del Manejo Pesquero del Pulpo; sin embargo, la reunión será hoy martes, a las 12 del día; en ese marco, el Centro Regional de Investigaciones Pesqueras de Yucalpetén (CRIPY de Inapesca) informará sobre el estatus de la pesquería, previo al inicio de la temporada de captura y se espera que recomienden una cuota para el pulpo maya.
“Ojalá que venga bien”
Para Juan Sosa Castillo, maestro carpintero, la temporada de pulpo es la más importante para él, ya que lo contratan para reparar cientos de alijos de madera desde el mes de mayo y, si la temporada de captura es “buena”, entonces habrá más alijos para reparar el próximo año.
“Hemos escuchado que hay mucha incertidumbre para la temporada; a nosotros nos traen los alijos conforme se van deteriorando, pero si no hay buena captura se reducen los gastos para repararlos; en esta ocasión hemos reparado 220 y los que están aquí ya son los últimos que quedan”, dijo.
Explicó que su trabajo comienza desde el mes de enero o febrero, cuando repara las embarcaciones mayores, primero las de escama y luego las del pulpo.
Finalmente los alijos se reparan en mayo para que a mediados de julio estén listos para la nueva temporada.
Urge una buena captura
“Este año me aumentó el número de alijos que reparo, me mandaron de 2 a 3 alijos más, pero porque la temporada pasada fue muy buena; conviene que haya una buena captura, porque así verán cómo mantener las embarcaciones.
“Aquí les cambiamos las tablas dañadas, las sellamos, les ponemos su calafate y los pintamos; comenzamos el trabajo 10 personas, porque es mucho al principio, y ya para esto, quedamos sólo 5, porque es lo último. Llevo 32 años siendo carpintero y siempre en el ramo pesquero; el trabajo fuerte es de enero a julio, en agosto sólo algunos arreglos a los barcos que hayan tenido algún detalle”, dijo.
La temporada de pulpo cada año activa la economía de los puertos, no sólo por los hombres de mar, sino por la derrama económica en sus preparativos y captura.
(Verónica Martínez)