Yucatán

Divide opiniones módulo de la Profeco en el Lucas de Gálvez

A unos días de entrar en funcionamiento un módulo de la Procuraduría Federal del Consumidor en los altos del mercado Lucas de Gálvez, éste ha generado opiniones encontradas entre los comerciantes y las personas que acuden a ese centro de abasto, según se pudo constatar durante un recorrido realizado ayer.

Las personas que acuden a ese mercado manifestaron que es una buena medida por parte de la Profeco, porque de esa manera se promueve, por una parte, la cultura de la denuncia y, por la otra, obliga a los comerciantes a mantener equilibradas sus básculas y vender kilos de a kilo.

“Creo que es muy importante que en esta época del año la Profeco haya instalado un módulo en este mercado, sobre todo ahora que se registran muchas altas y bajas en los precios de productos perecederos como las frutas, el huevo, las carnes de cerdo, res y pollo, etc.,” dijo Rodolfo Campos Cámara.

Cultura de la denuncia

Por otra parte, continuó Campos Cámara, “es necesario que las personas adopten la cultura de la denuncia y acudan al módulo a manifestar su inconformidad cuando consideren que no reciben el peso exacto o correcto de los productos que adquieran”.

Por su parte, Víctor Couoh señaló que “es bueno que la Profeco verifique que las básculas de los comerciantes del Lucas de Gálvez estén debidamente calibradas y cuenten con el sello de verificación, en caso contrario, comprar en lugares establecidos”.

En tanto que Ana María Mex dijo que los expendedores de cebolla, tomate y otras legumbres siempre han entregado kilos de a kilo, y que está de acuerdo que personal de la Profeco tenga un módulo en el mercado Lucas de Gálvez para evitar que otros comerciantes “vivales” se aprovechen de la situación y no entreguen kilos de a kilo.

Sólo sirve para “joder”

Durante el recorrido se observó que muchos comerciantes con tal de evitar a los inspectores de la Profeco, ya no venden frutas como la uva por kilo, sino por paquete con un valor de 20 pesos, es decir al menudeo, para evitar el uso de básculas, lo mismo sucede con las manzanas, mangos, limones, mandarinas y otros productos.

Por su parte, comerciantes del área de “Chicharroneros” como del pasillo adjunto a los expendedores de carne de pollo, consideraron que el módulo sólo sirve para “joderlos”. Sin embargo, cabe mencionar que la mayor parte de éstos explicaron que sus básculas cuentan con el sello de verificación y hasta aceptaron tomarse una fotografía colocando parte de su mercancía para constatar que sí venden kilos de a kilo.

POR ESTO! informó que el mercado Lucas de Gálvez cuenta con un Módulo de Atención e Información de la Profeco, el cual recibirá quejas, así como solicitudes para calibraciones de básculas y relojes checadores.

¿De lunes a viernes?

En este módulo se instaló también una Báscula del Consumidor que estará en el lugar de forma permanente con el objetivo de brindar certeza a las familias yucatecas, ya que podrán verificar que les vendan kilos completos.

De acuerdo con datos recabados la Profeco, cobrará 70 pesos a los comerciantes que sean denunciados por no vender kilos completos, siempre y cuando su báscula cuente con el sello de verificación de haber sido calibrada y hasta cuatro mil pesos a las personas que utilicen básculas que no estén calibradas y por consiguiente no tengan el sello de verificación.

Por cierto, el módulo de la Profeco no funcionó ayer y, según los comerciantes de alimentos ubicados en la parte alta frente a la rampa, comentaron que sólo permanece abierto de lunes a viernes.

(Víctor Lara Martínez)