Arantza Bolaina Hernández, presidenta de “Viva te quiero”, A.C., que apoya a las mujeres que viven en situación de violencia, invitó ayer a un desayuno para recaudar fondos el próximo jueves 6 de febrero, de 9 de la mañana a 12 horas, en el restaurante Habaneros de Xcumpich.
El donativo por persona será de 300 pesos, con derecho al desayuno completo y a 3 cartillas de bingo con las que podrán jugar y ganar regalos.
–Estos fondos –explicó– servirán para habilitar un predio que tenemos en el Centro de la ciudad a fin de poner allá nuestras oficinas y un refugio.
Arantza comentó que actualmente ofrecen a las mujeres terapia emocional y asesoría jurídica, pero la habilitación de la casa les permitiría contar con un centro de operaciones y, a la vez, un refugio para capacitar a las mujeres en temas de empoderamiento, emprendimiento y de vinculación con las empresas para que se empleen.
Violencia normalizada
Asimismo recordó que esta asociación inició sus operaciones el año pasado con el propósito de enfrentar el hecho de que las conductas violentas contra la mujer están tan normalizadas y están tan inmersas en las relaciones familiares que ya son imperceptibles. Generalmente empiezan con el control de pareja, que viene desde el noviazgo, incluso desde la amistad, y se van extendiendo a lo largo del tiempo.
–¿Por qué ocurre esto, por la forma en que se educa a las mujeres? –preguntamos.
Y Arantza respondió:
–Es por la educación y por la falta de autoestima. Muchas mujeres tienden a buscar la aprobación de los demás en vez de darse ellas mismas la aprobación. Es cultural, porque crecemos viendo a mamá que por amor todo lo da, todo lo aguanta, y cuando ya tienes una pareja prefieres una mala caricia que no tenerla o a quedarte sola.
–¿Se sacrifican soportando una pareja injusta para tener seguro al proveedor de la casa y no afectar a sus hijos en su preparación para la vida, en sus estudios?
–Sí, pero se olvidan de sus propios derechos.
–Además, maestra Arantza, muchas mujeres no tienen educación, de manera que no pueden buscar un empleo que sustituya al proveedor, ¿no es así?
–Así es, como no tienen educación, por eso mismo no ven sus opciones. Pero si se les abren los ojos, tal vez con educación y con información, cambiarían su forma de vivir, dejarían a esos hombres violentos.
Dependencia las hace sentir chiquitas
Continúa Arantza:
–Actualmente la dependencia es tanta que se sienten chiquitas, no encuentran el poder dentro de ellas para tomar decisiones, por eso muchas dicen: “Lo que diga mi marido está bien”.
Finalmente, la presidenta de “Viva te quiero”, A.C. invitó a la gente a que se sume a esta lucha para que, cada quien desde su trinchera, empiece a hacer algo por cambiar el estado de las cosas, es decir, la violencia que sufren las mujeres por falta de educación o por falta de confianza en sí mismas porque se sienten muy chiquitas ante quienes las maltratan.
Para mayor información, en redes: Viva te quiero.
Cel: 9993 87 10 14.
(Roberto López Méndez)