Yucatán

Don Antonio 'El Lomo” Turriza, todo un ícono del 'rey de los deportes”

TIZIMIN, Yucatán, 27 de enero.- Todo un ícono del “rey de los deportes”, don Antonio “El Lomo” Turriza, ha sido uno de los destacados jugadores en el béisbol y uno de los pioneros del sóftbol en esta ciudad.

Antonio Turriza Rodríguez, “El Lomo”, actualmente cuenta con 75 años de edad; en breve entrevista platicó que desde muy joven le gustaba jugar a este deporte.

“Jugaba en la escuela con mis compañeros, es mi deporte favorito, mi pasión; lo aprendí viendo cómo otros lo jugaban, ahora por la edad ya no puedo jugar, me retiré hace dos años, pero me sigue apasionando ver cómo otros lo hacen, inclusive en la televisión.

“Cuando tenía 17 años formé parte del equipo de primera fuerza Tábanos, me invitaron porque ya habían visto cómo realizaba mis jugadas dentro del terreno del juego, por mi velocidad al robar base y me barría, técnicas que sabía dominar muy bien. Anteriormente jugaba en un equipo de segunda fuerza, inicié como pitcher, pero no me gustaba porque en una ocasión le di en la cabeza a un bateador, preferí jugar como jardinero central. Jugar este deporte tiene sus riesgos, yo he sufrido algunos incidentes en la boca y en la rodilla.

“Nosotros comenzamos el sóftbol en Tizimín, porque no se jugaba, empezamos a practicar y formar equipos locales; sin embargo, el deporte que más me apasiona es el béisbol. En equipos de primera fuerza pertenecí a los Tábanos, también fui mánager del equipo Máquina Roja, me invitaron a formar parte de un campeonato en Cozumel, ahí nunca habían visto cómo se tira uno barriéndose para robar base, mucha gente se asombró y cuando vieron que lo hice todos se sorprendieron, ganándome el aplauso del público.

“Durante mi trayectoria como jugador al béisbol he recibido reconocimientos, trofeos, el equipo al que pertenecía se coronó campeón de la liga y por todos mis logros al ser un gran icono a este deporte, me han realizado homenajes por las administraciones pasadas.

“En ese tiempo a nosotros nunca nos pagaban por jugar, lo hacíamos por amor al juego, la única vez que gané fue en Cozumel, cuando participé en el campeonato; tuve la invitación de otros equipos a nivel estatal y nacional, pero no acepté porque no me gusta jugar contra mi pueblo”, relató.

Cabe mencionar que hace dos años que se retiró de jugar, pero sigue apoyando a este deporte y lo seguirá haciendo mientras Dios le preste vida, porque el béisbol es y será su pasión.

Don Tony Turriza, además de ser un buen jugador, también se dedica al oficio de la sastrería y es muy conocido en este ámbito. Se dedica a esta labor desde hace más de 56 años y la aprendió con el apoyo de su hermano.

“Desde entonces he tenido grandes clientes que se sienten satisfechos con mi trabajo”, culminó.

(Raquel Margarita Huerta)