El lunes fue el último día del mes de noviembre, día en que según la creencia de la gente acerca de los finados o el Hanal Pixan, se fueron de este mundo las ánimas a su lugar de origen, el inframundo, de donde según dichas creencias y tradiciones les permiten salir para regresar por unos días al mundo donde vivieron y en donde dejaron a sus familiares o dolientes.
En Valladolid se pudo ver que en algunas casas se encendieron velas, sin embargo, esta costumbre se está perdiendo en las grandes ciudades.
En comisarías todavía está más arraigada y vigente esta costumbre, donde en todas las casas se pudieron ver las velas y veladoras.
Las jóvenes Glendy y Teresita de Jesús Rodríguez dijeron al respecto, “en este último día se hicieron rezos en los hogares con comidas, como chachachuajes, panes de espelón y mucbipollos, así como bebidas como atoles o chocolate, para despedir a las ánimas de este mundo terrenal, así es hasta el próximo año que se volverá a celebrar de nuevo a las ánimas que vendrán a visitar a sus seres queridos en este mundo y los recibirán con rezos flores veladoras y comidas en los altares de finados”.
Por Manuel Vázquez Rivero