Yucatán

Tren Maya entrará a Mérida por un túnel

Rogelio Jiménez Pons, titular del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), informó ayer que el tramo de 4 kilómetros que abarcará el Tren Maya en Mérida será subterráneo, así como la estación que estará en La Plancha.

Dijo que lo anterior es viable económicamente, pues “la idea es entrar por abajo, de forma que no estorbe a la sociedad y para no molestar a nadie”.

Cuando algunos de los presentes le dijeron que hay un proyecto para hacer un parque en el lugar, Jiménez Pons consideró que ambos proyectos pueden convivir, pues puede haber ese parque arriba y por debajo la estación. Adelantó que se haría una estación con la misma arquitectura del edificio que hoy alberga a la Escuela Superior de Artes de Yucatán (ESAY).

“Nosotros somos especialistas en la materia y podemos presentar algunas alternativas para que vean que los propósitos se pueden cumplir perfectamente y que el tren no le estorbe a la ciudad, que genere una plusvalía a través de la estación, como las estaciones europeas, y se mantendrá una gran proporción del terreno que sea parque”.

Patrimonio de la ciudad

“Es un terreno federal y hay pocas opciones para dar un buen servicio y esta estación daba un buen servicio cuando operaba el tren de Mérida, y ese edificio es de patrimonio de la ciudad y queremos hacer una versión exactamente en el mismo valor del otro lado”, expresó.

“Entiendo la posición de que sea un parque, lo podemos hacer perfectamente, pero también podemos hacer por abajo una estación. Si entra por abajo no le molestaría a nadie”, reiteró.

Dijo que, en unas semanas, ya se tendría un proyecto concreto sobre este tema y que está pendiente una reunión con el Gobernador de Yucatán para tratar el asunto.

“Yo creo que la ciudad gana generando una estación respetuosa del tránsito, que le dé valor de una buena arquitectura como lo fue la estación de hace mucho tiempo y que sirva para vitalizar una zona actualmente deprimida”, señaló.

Ventajas

Sobre las complicaciones técnicas que implicaría una obra subterránea por el tipo de piso rocoso, dijo que éste no sería mayor problema y que incluso daría algunas ventajas al proyecto.

“He oído varias veces este comentario incluso con colegas de que el suelo es rocoso. Sí saben que Mérida es una zona kárstica y si uno hace un corte vertical se mantiene por décadas, es una piedra hasta cierto punto no tan dura, es caliza, pero estable y eso puede ser más fácil”, mencionó.

Señaló que en la Ciudad de México es incluso más complejo porque se hacen este tipo de excavaciones, como para la construcción del Metro, en lodo y con el nivel del manto freático a 1.50 ó 1.80 metros.

En el caso de Mérida, aseguró que hay muchas condiciones que se pueden superar porque en este caso se tiene el conocimiento de que el manto freático está a 7.5 u 8 metros, y que “aun teniendo el nivel freático arriba hay muchas formas técnicas para resolverlo y nosotros creemos que el subsuelo yucateco tiene cosas muy buenas, porque lo cortamos y ya no se nos viene encima y no hay que construir un escudo como se tiene que hacer en el lodo de la Ciudad de México”.

Dijo que en ingeniería es viable, así como desde el punto de vista económico; agregó que el tramo que se considera es de unos 4 kilómetros, desde el Oriente que entraría hasta la zona de La Plancha, donde estaría la estación y se excavaría a una profundidad de unos 6.5 metros.

Sobre el tren, dijo que aunque en un inicio se tenía considerado que fuera eléctrico, lo que seguramente será finalmente es que funcione con diesel o biodiesel, principalmente con el primero, pero con la posibilidad de transformación a hidrógeno y ello significaría a largo plazo que sea un tren 100 por ciento sin emisiones contaminantes.

Amparo

Con respecto al amparo promovido por integrantes del Consejo Regional Indígena y Popular de Xpujil (CRIPX), quienes anunciaron que les otorgaron la suspensión provisional de la ejecución del proyecto del Tren Maya, el funcionario aseguró que no han sido notificados al respecto, pero que en cuanto suceda se cumplirán los requerimientos que les soliciten.

“No nos han notificado, pero de recibirlo haremos el procedimiento de respuesta correspondiente, junto con el INPI y la Secretaría de Gobernación, presentaremos nuestros argumentos para tratar de solventar el problema”, expresó.

Dijo que no hay intención alguna de entrar en desacato con las autoridades judiciales, por lo que contestarán en tiempo y forma. Sin embargo, solicitó a los jueces “que tomen escala de las cosas”, pues los inconformes no son una comunidad o un poblado en sí, sino un grupo de personas, muy respetables, que se oponen al proyecto.

En este tenor, dijo que durante el proceso de consulta tuvieron una alta participación en la zona y una aprobación del 97 por ciento de los participantes y sólo el rechazo del 3 por ciento, entre ellos los del CRIPX, por lo que insistió en que el proyecto del Tren Maya está legitimado por la mayoría.

De la misma forma, dijo que la consulta sí cuenta con el aval de los diferentes organismos de la ONU, y que sólo hubo algunos señalamientos de la ONU Derechos Humanos, pero que bien pueden ser solventados.

“Acataremos cualquier decisión de los jueces, pero les pedimos que tomen la proporción de los hechos”, apuntó.

Reconoció que seguramente vendrán más amparos de este tipo.

EZLN

Sobre posibles acercamientos con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), dijo que el Gobierno Federal está completamente abierto al diálogo y que el Estado garantiza la libre expresión de las personas.

Sin embargo, aclaró que el Tren Maya no pasa por territorio zapatista y que sólo hay un enclave, un lugar cerca de Agua Azul, a 40 ó 50 kilómetros de Palenque, pero que no se pasa por territorio del EZLN.

(David Rico)