Conrado Roche Reyes
Grandes estrategias internacionales de diversas disciplinas deportivas se apoyan en la práctica del ajedrez para mantenerse en forma. No es de extrañar, por tanto, que en los cuerpos militares de varios países el juego ciencia sea bien visto.
En la Guardia Nacional la milenaria disciplina también es popular. No por nada muchos consideran que hay mucho de estrategia militar en la planeación de las maniobras de ataque y de defensa que se plantean quienes dirigen las batallas entre los ejércitos blanco y negro.
Uno de los más fieles adeptos a los encantos de Caissa, la musa del ajedrez, es el doctor y coronel Noé Cuervo Vázquez, comandante regional de la Guardia Nacional, con sede en el puerto de Progreso. El jefe militar, quien en su juventud fue asiduo participante en los torneos, se siente como pez en el agua en Yucatán, donde ese deporte, arte y ciencia está muy extendido.
Ex campeón juvenil en Veracruz, el coronel se apersonó la semana pasada en la “Casa del Ajedrez”, como se le conoce a la céntrica “Plaza Diamante” (calle 62 x 63, contra esquina del zócalo de Mérida), donde visitó el club “Bobby Fischer” y la tienda “Diagonales”, especializada en artículos del juego ciencia.
En este último lugar, adonde acudió con dos de sus asistentes, adquirió diversos implementos para enriquecer su arsenal de batallas cerebrales, como reloj, juegos y tableros, así como un guardapiezas estilo camuflage, lo que hacía juego con su uniforme.
El comandante Cuervo Vázquez no desaprovechó la oportunidad de disputar una partida amistosa con el secretario del club, el ex campeón estatal Jorge Alberto Balam Díaz, con quien sostuvo un par de tórridos encuentros que terminaron, tras vibrantes combinaciones y lances por ambos bandos, con salomónico saldo de 1-1.
El dirigente le informó al visitante que dos días más tarde (el domingo pasado) se celebraría, en la Unidad Deportiva Villa Palmira, el Torneo de Duplas, el cual le interesó mucho, sobre todo porque, dijo, planea foguearse para retomar su antigua forma. Ni tardo ni perezoso, se inscribió a la competencia, en la que hizo pareja con el joven profesional tekaxeño Sergio Miguel Polanco Santos. Su equipo se llamó “Cuervos”.
Ahí, el árbitro y entrenador Miguel Ricardo Sosa Pérez le presentó a Sion Radamantys Galaviz Medina, conocido como el “Siete Oros”, en la actualidad la más prometedora figura juvenil de México.
En esa competencia, el comandante regional se topó con un viejo conocido, el gran maestro cubano-mexicano Juan Carlos González Zamora, quien fue su entrenador en tierras jarochas. Ambos amigos se pusieron de acuerdo para entrenar y hablar de ajedrez en el puerto más importante del Estado.
El coronel Cuervo también hizo extensiva la invitación a Balam Díaz, con quien volvió a jugar varios encuentros en nueva visita al “Bobby Fischer”, donde el sábado pasado no se cansaba de sostener batallas cerebrales.
Al ver su pasión por la milenaria disciplina, el dirigente lo acompañó a una cafetería cercana donde sabía que Polanco Santos y otro joven entrenaban con ayuda de una computadora. El militar se pasó ahí varias horas.
El ex monarca estatal comentó que también entre los elementos de la Policía Federal está muy difundido el ajedrez y con frecuencia van a adquirir ahí juegos y tableros para afinar su estrategia militar.