Yucatán

Hay tortuguismo para frenar despojo de tierras

Existe fundada preocupación entre los campesinos y ejidatarios del Estado en seguir siendo víctimas del despojo de su patrimonio, ya que las demandas legales presentadas contra los acaparadores de tierras avanza con tortuguismo, mientras que los especuladores y desarrollos inmobiliarios fuera de la ley continúan y a paso acelerado, advirtió ayer el profesor Pedro Quijano Uc, dirigente del Frente Campesino por la Defensa de la Tierra y la Vida.

Expuso que las autoridades agrarias federales no han demostrado su verdadero compromiso de defender a los campesinos de los especuladores y lo peor de todo es que tampoco el Gobierno Estatal se ha mostrado interesado en intervenir en favor de los afectados.

–Estamos muy preocupados porque, después de la buena actuación que había tenido el delegado de la Procuraduría Agraria, Alfredo Ramírez Gómez (quien fue removido de su cargo por presiones precisamente de grupos de especuladores), hemos sentido que las autoridades no están trabajando apegadas a derecho, como debe ser y eso es grave, acotó.

Medidas más drásticas

Resaltó que, en ese sentido, los miembros del organismo que representa, han llegado al consenso de que hay un tortuguismo intencional para atender las demandas presentadas con anterioridad en contra de los voraces empresarios y demás acaparadores, y por lo tanto, no se está avanzando en la defensa del territorio.

En contrapartida –apuntó–, los proyectos de las empresas privadas en todos los sentidos, sean los compradores de tierras bajo esquemas legaloides y las inmobiliarias, que tienen como sustento el arrebato de las tierras están avanzando sin ningún obstáculo.

Quijano Uc mencionó que los grupos campesinos defensores de su patrimonio, como son los casos de Chicxulub Pueblo, Hunucmá, Kinchil e Ixil, siguen con sus reuniones internas, pero existe fundada preocupación por lo antes expuesto.

Movilizaciones

Advirtió que si las cosas persisten de esa manera obligará a que nuevamente se convoquen a movilizaciones y a tomar medidas más drásticas ante los oídos sordos de las autoridades vinculadas al agro.

Lamentablemente –observó–, del Gobierno del Estado no esperamos para nada que haya un posicionamiento porque se ha mostrado apático, además de que en su pasado informe no escuchamos nada que se refiera a su postura para defender el territorio indígena maya.

Insistió en que todo lo anterior resulta muy preocupante, porque si las dependencias federales como la Procuraduría Agraria y el Registro Agrario Nacional continúan dando la espalda a los campesinos, y se tiene localmente a un gobierno que tampoco hace nada para defender a los ejidatarios, qué les espera a los hombres de campo.

(Rafael Mis Cobá)