Yucatán

Médicos deben practicar el humanitarismo

Ningún paciente debe quedarse sin recibir atención médica por falta de dinero, dijo ayer el Dr. Carlos Javier Sáenz Larrache durante la conferencia que dictó ayer sobre “Humanismo en el siglo XXI” como parte del XXI Congreso Nacional de Anestesiología.

El Dr. Saénz Larrache recibió el año pasado la Medalla al Mérito Médico “Dres. Eduardo y Antonio Laviada Arrigunaga” junto con la Dra. María Flores Méndez por ejercer la medicina con ética, humanismo y capacidad relevante.

En su exposición, dijo que el humanismo comenzó en el siglo XVI, es decir, desde el Renacimiento; en el caso de la medicina consiste en una serie de reglas o preceptos para demostrar la bondad de la profesión. “Mientras el humanismo hace al médico culto, el humanitarismo hace al médico bueno”, explicó.

–Desgraciadamente sabemos que hay algunos médicos, que son los menos, cuya intención es que quieren cobrar más para crecer desde el punto de vista monetario. Desde mi punto de visita, el médico debe cobrar honorarios justos; existe una justicia dentro del catálogo de honorarios y uno no se debe brincar esa justicia e inclusive al hablar de humanitarismo puede llegar el momento que el médico efectúe una actividad sin cobrar ni ningún centavo, sobre todo cuando la persona no tiene ingresos para cubrir la atención que requiere. Por lo tanto, las personas que carezcan de recursos deben recibir la atención médica, a través de cualquier institución de salud, sin que medie el factor monetario, dijo.

Dos veces bueno

–El humanismo, al final del camino, debe estar relacionado íntimamente con el humanitarismo; no es lo mismo hablar de humanidad, que hablar de humanitarismo; por lo tanto, si el médico es bueno y humanista, esto es dos veces bueno y eso es lo que promueve la estructura de la práctica del humanismo, que aunque nació en el siglo XVI, ayer se trasladó a nuestra era, precisamente para ver cómo ha evolucionado y cuál es la perspectiva que debe tener el médico.

Respecto a la eutanasia, el aborto y otros temas que son de difícil comprensión, dijo que todos están ejecutados por una serie de normas que fijan las asociaciones nacionales que, a su vez, están regidas por una asociación médica mundial y que año con año revisa todos estos temas y establece cuál es la conducta adecuada del médico.

–Si el médico considera que un evento está fuera de los aspectos legales o fuera de la jurisdicción adecuada, puede apelar a una nueva ley que se llama “Objeción de conciencia”, que establece que el médico o cualquier trabajador de la salud puede detener alguna actividad que considere esté fuera del código legal o del código de ética, ya que existe una ética general y una ética médica, apuntó.

–Los aspectos de tipo legal los están desarrollando ahorita e inclusive hay conferencistas que son abogados y nos traen los preceptos legales; en mi caso voy a exponer los preceptos conductuales, de cómo debe ser nuestra conducta y nuestra presencia ante la sociedad y ante la sociedad médica y del colegio médico, porque así es como como el médico también evoluciona y si no evoluciona bien, tenemos que considerarlo como un médico inmoral.

El aborto

Respecto al aborto, opinó que la concepción del ser humano comienza desde el momento de la presencia de los dos gametos masculino y femenino; por consiguiente, desde ese momento existe un ser humano reconocido; el problema viene porque algunas instituciones o algunas corrientes de pensamiento están dando al ser humano una temporalidad que no tiene; hay quien considera que es un ser humano desde la semana número 7 o desde la semana número 15, lo que es indiferente, porque desde el punto de vista médico, la concepción del ser humano se hace desde el momento en que el gameto masculino y el gameto femenino se unen y produce el ser humano aunque tenga unas horas; por lo tanto, no podemos aceptar bajo ninguna circunstancia y como médico puede negarse para realizar un aborto, a menos que se encuentre en peligro la vida de la madre o que el feto ya esté muerto.

El Insabi

Finalmente, al hablar sobre el Instituto Nacional de la Salud y Bienestar (Insabi), dijo que es un organismo que prácticamente está empezando, pero sus pasos iniciales han sido –por decir lo menos– inciertos, que han dejado a la población sin medicamentos y de atención médica adecuada, porque la oferta de servicios es 50 o 100 veces menor a la demanda y eso hace que mucha gente se quede sin servicios, con las consecuencias correspondientes: no solamente se quedan con su enfermedad, sino quedarse sin lo más precioso que tienen, que es la vida.

Esperemos que este Instituto pueda crecer y crecer bien, si no se estaría violando el Artículo 4 de la Carta Magna, que dice que la persona y todo ser humano tiene derecho a la salud y a la atención a su salud, concluyó.

(Víctor Lara Martínez)