Un grupo de artesanos pretendió ingresar esta mañana a la zona arqueológica de Chichén Itzá pese a que el acceso se encuentra restringido por la contingencia del coronavirus COVID-19.
El gobernador Mauricio Vila Dosal anunció hace unos días que se suspendía el ingreso a personas a las zonas arqueológicas de Chichén Itzá y Dzibilchaltún para el equinoccio del 20, 21 y 22 de marzo con el fin de reducir significativamente las posibilidades de contagio del coronavirus COVID-19
Se destinaron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y de la municipal para resguardar y controlar cualquier incidente en el paradero turístico cerrado temporalmente.
Mariana Mex Yam, representante de una agrupación que integra a 800 artesanos que laboran en la zona, explicó que el enojo radica en que cerca de diez mil familias se quedarían sin sustento ante la medida impuesta por las autoridades.
El lugar recibe un flujo de gente de cerca de 50 mil personas de distintos países y deja una derrama económica cada año de millones de pesos.
Con información de Alfredo Osorio
Por Redacción Digital Por Esto!