Yucatán

Los trabajadores de las empresas funerarias de esta ciudad no cuentan con capacitación para el manejo de los cuerpos de personas fallecidas por Covid-19.

“Hasta el momento no nos ha llegado ninguno con coronavirus y esperemos que no llegue porque no estamos preparados”, admitió un empleado.

El entrevistado informó que el embalsamador es el encargado de preparar y conservar el cuerpo durante un tiempo determinado a fin de que pueda ser velado.

Durante la preparación utiliza guantes y una bata para evitar el contacto con el cadáver, pero en caso de llegar un muerto con coronavirus, sus implementos de trabajo resultarían inadecuados.

“Nos deberían dar trajes especiales como a los doctores y enfermeras que trabajan con el virus”, dijo.

Otro trabajador de la Funeraria Quevedo manifestó que tienen capacitación para el manejo de cuerpos, pero se negó a informarnos si también saben qué hacer con los que fallecen por Covid-19

Empleados de las funerarias están conscientes de los potenciales riesgos; sin embargo, los dueños de los negocios aún no toman cartas en el asunto.

El proceso de preparación de un cadáver es el siguiente: Cuando un cuerpo llega a una funeraria se le sacan las entrañas, se enjuagan y se ponen en una bolsa que contiene formol, alcohol y glicerina, lo que impide su descomposición, mientras se extraen del cuerpo gases, residuos de orina y heces fecales.

El proceso tarda entre 40 minutos y una hora; como la piel se torna pálida hay que maquillarla para que se vea “natural”.

(Melly Manzanero)