Su vivienda, a punto de desplomarse
TIZIMIN, Yucatán, 31 de mayo.- Nadie se imaginaría que en este lugar habita una abuelita, pues todos pensarían que las personas que habitan en los primeros cuadros de la ciudad viven de manera acomodada, sin embargo, la realidad es diferente.
Durante esta pandemia, varios casos de personas de avanzada edad que viven solos y tienen que ver cómo conseguir sus alimentos, han salido a la luz.
Pero este caso va más allá de una despensa o un plato de comida, las deplorables condiciones en las que se encuentra su vivienda es lo que impacta, cuyos bloques y castillos están carcomidos por el salitre, lo que ha ocasionado que en los cuatro puntos de la vivienda estén cuarteados y a punto de desplomarse.
Magaña Turriza Rosa Arminda vive en una casa ubicada en la calle 59 entre 44-A y 46 número 375 de la colonia Centro; después de la torrencial lluvia registrada la tarde del sábado, la abuelita salió de su vivienda para pedir ayuda a la gente que pasaba; muchos la ignoraron porque ella no puede expresarse, sólo hacía señales con sus manos, indicando que la lluvia filtraba en su hogar.
La abuelita no puede hablar, pero entiende con señas lo que le preguntas. Se ingresó a la casa, primeramente, dando a conocer la mala situación de los bloques, que saltan a la vista desde la entrada, ya que los ha carcomido el salitre.
En el interior la abuelita señalaba las enormes cuarteaduras desde la cimentación hasta el techo en los cuatro puntos de sus humilde hogar, los castillos estaban cuarteados y las cabillas también al descubierto; ella duerme en este espacio pero ya teme que se le caiga encima un día de estos, por la humedad que se está registrando por las lluvias.
Lamentablemente, han pasado muchos Gobiernos y han pasado personas que están al mando de programas de vivienda, pero en ningún momento han detectado (o se han hecho de la vista gorda) estos casos, para darles prioridad, porque la necesidad es más apremiante.
Sin embargo, es más fácil que se les otorgue a sus allegados aun sabiendo y viendo que han recibido apoyos del Gobierno dos, tres y hasta cinco veces.
Quizá el problema sea el documento del solar, como uno de los requisitos, pero existen vías para tramitar una constancia ejidal u otro documento para justificar este apoyo y así construir a las personas que, pese a su avanzada edad, merecen una vivienda digna para pasar el resto de su vidas, porque de alguna forma, han contribuido también en el desarrollo y bienestar de la nación.
Lamentablemente, quizá este caso quede en el olvido, tal como ha ocurrido con otros casos, pero la abuelita pide apoyo a la sociedad para que alguna persona de buen corazón pueda apoyarla en esta necesidad, eso sin contar la difícil situación que atraviesa al vivir sola en este lugar durante esta pandemia. La vivienda se ubica en la subida, yendo para el parque de Los Almendros, a lado del bar Delios.
(Efraín Valencia)